La presidenta de Alcoa España, Rosa García, ha advertido de que el beneficio que conllevará la puesta en marcha del gasoducto de la Mariña de Lugo —con la sustitución del fuel por el gas natural en la planta que la multinacional tiene en San Cibrao (Cervo)— "no tiene nada que ver con el tema eléctrico".

Así lo ha dicho, a preguntas de los periodistas, tras el acto de inauguración de esta infraestructura, que permite a la factoría de Alcoa mejoras en cuanto a competitividad, en el apartado económico, y la reducción de en torno a un 30% de las emisiones de gas invernadero, desde el punto de vista medioambiental.

García, en declaraciones a los medios de comunicación, ha explicado que en San Cibrao hay dos plantas, la de alúmina y la de productos de aluminio. La de alúmina es intensiva en energía térmica, mientras que la de aluminio (el mismo proceso que Avilés y A Coruña) es intensiva en energía eléctrica, ha apuntado.

"Hoy lo que celebramos es que con la llegada del gas tenemos una posición muy mejorada respecto a fuel oil desde el punto de vista competitivo y medioambiental", ha resaltado.

"Esto no tiene nada que ver con el tema eléctrico, es algo de la planta de alúmina, es un tema de energía térmica, y lo que nos permite es tener un futuro para la planta de alúmina de San Cibrao, que son muchísimos puestos de trabajo y que nos permite pensar en el futuro de otra manera", ha expuesto.

El objetivo de Alcoa, además, según ha subrayado, es "colocar" a sus plantas "en todo el mundo y, en particular a la de San Cibrao, en una posición que permita competir en cualquier momento, independientemente de las condiciones de mercado".

Con fuel oil se hallaban en una situación de "desventaja no solo en el coste diario, sino también pensando en el futuro en potenciales inversiones", según ha agregado. Pero ahora el gas natural "pone a San Cibrao en una posición competitiva como una de las mejores plantas de alúmina que pueda haber en el mundo", ha llamado la atención.

"estancia tranquila"

Por su parte, el titular de la Xunta, durante su intervención en el acto formal de inauguración del gasoducto, ha hablado de una "estancia tranquila" para Alcoa con esta "infraestructura imprescindible".

Asimismo, ha valorado la compañía, por el empleo que genera y lo que produce, y ha destacado que "a partir de ahora" podrá hacerlo "con mayor intensidad" y una "alta flexibilidad".

En este sentido, Núñez Feijóo ha bromeado con que se dedica "a vender Alcoa", algo que, ha afirmado, es su "obligación", porque "la cuenta de resultados de las empresas", para la Xunta, se mide en los puestos de trabajo que supone una compañía. "Espero que mis amigos norteamericanos tomen nota de que estoy muy orgulloso", ha finalizado.

"papel fundamental"

Por su parte, durante su discurso ante las autoridades, la máxima representante de Alcoa en España ha agradecido el "esfuerzo compartido" de Xunta y Gas Natural Fenosa, así como el de las comunidades de A Mariña.

También ha calificado como "fundamental" el papel que ha representado en la materialización del proyecto el Ministerio de Industria, junto al de Medio Ambiente.

Alcoa, según ha resaltado, "seguramente va a ser el principal usuario" del gasoducto, "pero no el único", ya que la infraestructura permite el acceso a población y empresas de la comarca de una forma "segura, cómoda y fiable".

De ahí que haya concluido que el gasoducto "va a impulsar el crecimiento económico" de la Mariña, del mismo modo que Núñez Feijóo se ha referido a la posibilidad de dar "pasos firmes" en la recuperación.