El Ayuntamiento de Logroño ha ayudado desde el año 2012 a un total de 500 emprendedores de la ciudad con un importe en subvenciones a microempresas por 1,3 millones de euros, además de con otras medidas, como las licencias exprés o la exención de la tasa de apertura para nuevos negocios.

La alcaldesa de Logroño, Cuca Gamarra, se ha reunido esta mañana con un grupo de once emprendedores, representantes de los 500 que han recibido en este mandato una de las ayudas a microempresas concedidas por el Ayuntamiento.

El objetivo del encuentro -celebrado en uno de los restaurantes que ha sido puesto en marcha con este apoyo municipal- ha sido conocer de primera mano las experiencias de emprendimiento vividas por estos logroñeses.

Además, la alcaldesa ha aprovechado el momento para dar a conocer la nueva convocatoria de subvenciones que fue ayer aprobada por la Junta de Gobierno y que para este año parte de una cantidad inicial de 400.000 euros.

"Una partida que -como ha señalado Gamarra- será ampliada si es necesario, como hemos tenido que hacer los años anteriores ante la gran demanda recibida. Que se acabe la partida es en este caso una gran noticia".

Las ayudas.

En total, en estos años se han concedido 1,3 millones de euros para 500 ayudas que han permitido la creación de 671 puestos de trabajo. La demanda ha ido creciendo desde la primera convocatoria en 2012.

En concreto, en 2014 fueron invertidos 607.000 euros (partiendo de una cantidad inicial de 200.000) para 229 empresas que conllevaron la creación de 308 puestos de trabajo, 268 de ellos en régimen de autónomos. 162 de los beneficiarios fueron mujeres y 146 hombres. Comercios fueron 89 y 140 del resto de actividades.

En 2012 fueron 80 las empresas creadas con 117 empleos, subvencionadas con 220.000 euros; al año siguiente, 2013, fueron 191 las actividades impulsadas con 246 empleos y una ayuda municipal de 508.500 euros.

"Éste es uno de los programas puestos en marcha en este Mandato de los que más orgullosos nos sentimos porque ha permitido materializar las ilusiones de muchos logroñeses; ofrecer una alternativa laboral viable en unos momentos en que el mercado de trabajo presentaba más dificultades", ha destacado Gamarra.

Estas subvenciones tienen como objeto financiar parcialmente la creación de microempresas (hasta 25 trabajadores en oficinas, bajos comerciales, instalaciones o talleres) que inicien una actividad empresarial o profesional y se instalen en el término municipal de Logroño, promoviendo la creación de empleo.

Las cuantías otorgadas parten de 2.500 euros que suben hasta 3.000 si la empresa se implanta en el Casco Antiguo y hasta 4.000 si cuenta con tres o más trabajadores.

A todo ello se le suman 500 euros más si se trata de negocios adquiridos por traspaso, venta o cesión por la jubilación del anterior propietario y que supongan continuidad de la misma actividad. El pago de la subvención se efectúa en su totalidad en el momento del acuerdo de concesión.

"cuando más falta hace".

"Esta ayuda, que además les llega en el momento inicial de la actividad, cuando más falta hace, ha contribuido a hacer realidad proyectos muy creativos, surgidos del talento de muchos jóvenes que han visto en el emprendimiento un trabajo y un modo de vida", ha dicho Gamarra.

En este sentido, la alcaldesa ha destacado su satisfacción al comprobar cómo "lo que fue una idea en un momento dado se ha convertido en un negocio sólido".

"Además de las posibilidades laborales individuales, esta línea de ayudas a ofrecido grandes beneficios a la ciudad en su conjunto ya que ha fortalecido el espíritu y los valores del emprendimiento y contribuido a generar riqueza para todos", ha asegurado Gamarra durante el encuentro.

A la reunión ha asistido un grupo de emprendedores que comenzó su actividad con apoyo municipal, permitiendo la puesta en marcha de un comercio de ropa y complementos para la mujer; otro del ámbito del hogar, especializado en confección y colocación de cortinas; venta de té; academia de enseñanza; carnicería-charcutería; oficina técnica del sector vitivinícola; librería-papelería; escuela deportiva; publicidad-periodismo; clínica nutriestética; clínica dental; y una bocatería hamburguesería.

Se trata, a juicio de la regidora municipal, de "una muestra de la variedad de proyectos que han abierto una salida profesional a sus promotores pero también incrementado la oferta de los logroñeses, fortaleciendo el comercio y los servicios de centro".

Mas ventajas.

Además de estas ayudas directas a la puesta en marcha de nuevas iniciativas empresariales, el Ayuntamiento se ha implicado en este mandato en el apoyo a los emprendedores a través de otros instrumentos que han sido también brevemente recordados por la alcaldesa.

Gamarra ha asegurado que Logroño "se ha convertido en una ciudad muy atractiva para la inversión, con una administración local que se ha convertido en aliado reduciendo la burocracia y estableciendo las condiciones adecuadas para el emprendimiento".

Así, se ha actuado a través de una política fiscal que ha apostado por la congelación generalizada de impuestos, además de por aprobar bonificaciones específicas que han reducido a la mitad el IBI y el IAE de comerciantes, emprendedores y centros especiales de empleo.

En una ciudad en la que además ya no es preciso licencia para abrir un establecimiento y en la que están vigentes las "licencias express", reduciendo trámites y costes para las pymes. Además, el Ayuntamiento ha disminuido de 72 a 30 días el plazo de pago a proveedores, incrementando la liquidez de muchas empresas que facturan con la administración.

Como ha relatado una de las emprendedoras, Aña Dueñas, que abrió una carnicería en el Mercado del Corregidor, "que va bien, no me puedo quejar", la ayuda "vino muy bien sobre todo al principio, cuanto tienes que hacer un gran desembolso inicial", algo que ha definido como "lo más complicado para ser emprendedor, junto con tomar la decisión, pero hay que empezar y hacerlo".