La vivienda en la Comunidad Valenciana cerró 2014 con una renta media de 583 euros y una superficie media de 117 metros cuadrados, según el informe mensual realizado por el portal pisos.com, que revela un incremento de los precios del 0,89 por ciento respecto a noviembre, pero un descenso del 0,50 respecto a diciembre de 2013.

El estudio señala, además, que la Comunitat Valenciana es la quinta autonomía con la mensualidad más cara para los inquilinos, por detrás de Madrid (988 euros/mes), el País Vasco (891), Baleares (748) y Cataluña (673).

A nivel nacional, el piso tipo de alquiler en España finalizó el mes de diciembre con una superficie media de 106 metros cuadrados y una mensualidad media de 597 euros, lo que supone un ascenso mensual del 0,55 por ciento, pero una caída del 3,40 por ciento interanual.

En cuanto a las provincias valencianas, Valencia (1,80%) es la provincia española que más sube frente a noviembre, mientras que la cuarta caída más llamativa del país es la de Castellón (-2,31%). En términos interanuales, Valencia es la sexta provincia con mayor subida de precios (2,64%) en tanto que Castellón (-3,73%) y Alicante (-1,22%) caen.

Con 601 euros de renta media mensual en diciembre de 2014, Valencia es la décima provincia más cara de España, y Alicante, con 598 euros de renta media mensual, la undécima. Castellón, con 416 euros de mensualidad media, es la más asequible para los valencianos y la sexta capital más barata del país.

El alquiler volverá a ser eclipsado por la compra

Según pisos.com, el abandono de los mínimos en lo que respecta a hipotecas, compraventas y precios de venta ha vuelto a poner el foco en la propiedad.

Según Miguel Ángel Alemany, director general del portal, "el alquiler volverá a ser eclipsado por la compra según vaya prosperando la situación económica de los ciudadanos".

Para Alemany, "la vuelta de la demanda compradora al mercado trastocará el perfil del inquilino, que con la crisis se amplió". No obstante, el responsable del portal inmobiliario estima que el despegue experimentado por el arrendamiento no pasará a la historia del sector como un simple éxito fugaz.