El Juzgado de Primera Instancia número 10 de Murcia condena al neurólogo M. C. E., a Mapfre Industrial, a Winterthur Seguros, a la Clínica Virgen de la Vega y a Asisa a pagarle también al padre de la niña 30.961 euros.

La pequeña llegó a la clínica el día 21 de julio de 1999 y fue atendida por el neurólogo y neurocirujano. Éste le mandó dos pruebas: una resonancia, que se le realizó ese mismo día, y un escáner, que se realizó al día siguiente, pero cuyos resultados no se conocieron hasta el día 23. La menor ya llevaba dos días sin operar y los dolores seguían creciendo.

La sentencia, que ha sido recurrida, dice que la joven debió ser operada, como mucho, el día 23, cuando se conoció el resultado del escáner, pero la intervención no se realizó hasta el día 26.

76 horas de dolor

El médico se fue de fin de semana, por lo que, desde las 10.00 horas del viernes 23 de julio que visitó a la niña hasta las 14.00 horas del 26, lunes, transcurrieron 76 horas en las que no se realizó ninguna prueba y en las que se desencadenó la paraplejia.

La sentencia dice que si la niña hubiera sido operada el 23 de julio, «no habría quedado parapléjica», y califica de «irresponsable y reprobable» el comportamiento del médico que, a pesar de la gravedad de la menor, «la desatendió sin dejar a ningún otro profesional especialista encargado».

Por todo ello, la menor sufrió fuertes dolores, estuvo sedada durante el fin de semana con fuertes calmantes y perdió la sensibilidad de sus piernas y necesitó el uso de pañales. Al final, quedó parapléjica.

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Ingresa. Pueden hacer algo

Una niña de 15 años ingresa en la Clínica Virgen de la Vega con una parálisis facial, que aún es reversible, el 21 de julio de 1999. La menor tiene un tumor.

Días de espera. Queda parapléjica

El médico le pide una resonancia y le manda un escáner para el día 22. El resultado llega el día 23, pero no la operan hasta el día 26 cuando la parálisis ya es irreversible y la niña se queda parapléjica.

La indemnizan. La clínica pagará

Un juzgado de Murcia ha condenado al neurólogo, a la clínica, a una sociedad de asistencia médica y a dos aseguradoras a que indemnicen a la joven con 845.000 euros.