Los extranjeros representan el 13% de la población activa en España.

Según los últimos datos de la Encuesta de Población Activa del primer trimestre de 2007, hay un total de 2.653.300 personas extranjeras trabajando legalmente.

Y se calcula que si se cerrasen hoy las fronteras europeas a los extranjeros, en el año 2050 faltarían 55 millones de personas para trabajar en el continente.

El número de empleados extranjeros llega a alcanzar el 16% en empresas de trabajo temporal, como Randstad, que ha elaborado un perfil medio del trabajador inmigrante en España.

Perfil

De dónde. Los países que siguen destacando son Ecuador (16% del total), Perú (13%) y Colombia (8,6%). Suponen un alto porcentaje, pero el número de personas procedentes de estos países disminuyó en 2006 respecto al año anterior. Los que han crecido entre 2005 y 2006 son los marroquíes, que han pasado del 9,5% al 11,7%, y los rumanos (del 3,8% al 5%).

A dónde. Cada nacionalidad tiene una provincia de preferencia para trabajar y vivir. Los inmigrantes de Madrid son principalmente de origen ecuatoriano; los de Barcelona y Murcia, marroquíes; los de Guipúzcoa, portugueses; los de A Coruña, suizos; los de Salamanca, franceses, y los de Tenerife, venezolanos.

Qué hacen. Los trabajadores procedentes de la Unión Europea tienen funciones parecidas a las de los españoles –con predominio de puestos administrativos, de peón, manipulador o teleoperador–. Los procedentes de África buscan empleos de mozo o de peón, y los de Centroamérica y Suramerica se centran en los servicios de limpieza, peones y trabajos de hostelería.