Felipe Espinosa, exresponsable de la empresa pública Valenciana de Aprovechamientos Energéticos y Residuos (Vaersa), imputado en una causa abierta en relación con un presunto delito de malversación, ha pedido al juez que le autorice viajar a Zibo (China).

Así se recoge en una providencia, facilitada por el Tribunal Superior de Justicia de la Comunitat Valenciana (TSJCV), dictada por el juzgado de Instrucción número 15 de Valencia, encargado de la investigación abierta a exresponsables de Vaersa por presunta malversación.

En dicha resolución, el imputado pide al juez que le permita viajar a Zibo, y la autoridad pública traslada la solicitud al ministerio fiscal y al resto de partes personadas para que en cinco días puedan efectuar las alegaciones que estimen convenientes.

En otra providencia, y también a petición de Espinosa, el juez requiere que se oficie a la Sección de Criminalística, Grupo de Informática Forense, para que entregue al imputado una copia de los contenidos de los efectos intervenidos en el registro de su domicilio, y a los que se hacen referencia en el auto de 9 de diciembre de 2014.

Precisamente en este auto, el juez acordaba expedir mandamiento al Grupo de Informática Forense para que estudiara y analizara la información que contuvieran los teléfonos móviles, ordenadores, tablets, tarjetas de memoria, pendrives y otros dispositivos de almacenamiento intervenidos a los exresponsables de Vaersa Enrique Simó y Felipe Espinosa.

El magistrado requería la confección de un informe pericial y el estudio de los correos que obran en las diferentes cuentas que contienen los dispositivos electrónicos intervenidos a los exresponsables de la empresa pública.

En la resolución se especificaba que en la sede de la empresa Vaersa —en el despacho de Simó—, y en el domicilio de Felipe Espinosa, ambos imputados en la causa, la Policía intervino distintos efectos de almacenamiento como móviles, ordenadores, tarjetas de memoria y pendrives, a raíz del auto del juez de 23 de junio de este año por el que se acordaba la incoación de las diligencias previas en este caso —a raíz de una querella de Fiscalía— y se autorizaba la entrada y registro para acceder a los dispositivos electrónicos de ambos para ser estudiados y analizados "por existir indicios fehacientes de la comisión de un delito de malversación y prevaricación".

Simó fue director de la empresa pública Vaersa hasta el pasado 31 de octubre, cuando presentó su dimisión del cargo. El exdirectivo fue detenido y puesto en libertad con cargos. Igualmente fue detenido y puesto en libertad con cargos el exresponsable de Vaersa Felipe Espinosa. Sobre ambos se acordó la obligación de comparecencia periódica en el juzgado y retirada de pasaporte.

La gestión de Vaersa fue cuestionada por la CGT, que presentó tres denuncias en Fiscalía Anticorrupción: por la compra de 65 vehículos todoterreno por 1,4 millones de euros en 2010; por el pago de productividad a directivos y por el abono de 1,8 millones de euros a un letrado supuestamente contratado 'a dedo'.