El director de gestión de recursos de la Comisión Europea, Georg Haeusler, ha rechazado este viernes cualquier artimaña por parte de los agricultores y de los ganaderos para cumplir el greening, el componente verde de la nueva PAC, y ha sido tajante al advertir de que si no se cumple ese compromiso con la conservación del medio ambiente habrá "pocas posibilidades" para mantener la financiación de la política agrícola común más allá de 2020, cuando expira el actual marco de financiación.

Así lo ha asegurado durante su intervención este viernes en la jornada en la que la Junta de Castilla y León ha presentado su estrategia global para el sector agrario, 'Agrohorizonte 2020', un foro en el que el Haeusler ha defendido la negociación del nuevo marco financiero de la PAC con especial atención a la introducción de ese componente verde como contrapartida en los servicios que la agricultura restituye a la sociedad.

Según ha augurado, si los perceptores de la PAC no consiguen demostrar en tres o cinco años su contribución a la conservación de medio ambiente y a la lucha contra el cambio climático habrá "pocas posibilidades" para mantener en futuras negociaciones esa financiación europea al sector primario. "Si no cumplimos el problema es muy gordo", ha sentenciado.

"Es un mensaje muy importante", ha considerado Haeusler, quien ha insistido en que sin esa contribución efectiva a la conservación del medio ambiente, vital sobre todo en el norte de Europa, habrá "poco, poco futuro" para las ayudas directas.

Por otro lado, Georg Haeusler ha recordado que la nueva PAC tiene un enfoque de mercado en el que hay pocos instrumentos de intervención, con excepción del fondo de crisis a modo de seguro con el que se responderá a futuras crisis del sector. En este sentido, ha advertido a los agricultores y a los ganaderos que de en el futuro tendrán que justificar muy bien si hay o no una crisis del sector ya que se necesitará la solidaridad de todo el sector para financiar ese puntual problema a través de ese fondo.

"Hay que bajar la voluntad y exigencias del sector para pedir ayudas", ha recomendado el político de la CE, quien ha aprovechado la ocasión también para alabar la flexibilidad que se ha incluido para la aplicación de la nueva PAC si bien ha advertido también del "peligro" de que pueda haber un problema de competencia para los productores si hay aplicaciones distintas en los diferentes territorios.

"La flexibilidad es un enemigo natural de la simplificación", ha continuado Haeusler, quien ha lamentado también que la inclusión del citado 'greening' en la nueva PAC no haya ayudado precisamente a esa sencillez que se buscaba.

Finalmente, el director de gestión de recursos de la Comisión Europea ha dejado un mensaje de optimismo desde el convencimiento de que la agricultura y la ganadería europea representa a "un sector con futuro y dinamismo" por tener una capacidad de adaptación "como casi ninguno". "No es un sector del pasado o del siglo XX sino de futuro", a lo que ha sumado las "oportunidades excelentes" que se abren para el mercado europeo en países como Corea del Sur, Japón o India con los que se está negociando, además de Vietnam o Canadá con los que ya se han alcanzado acuerdos.

Haeusler ha recordado que además de un sector económico la agricultura y la ganadería es la herencia, la cultura y la razón de ser.