El concejal de Participación Ciudadana y Coordinación de Distritos del Ayuntamiento de Sevilla, Beltrán Pérez (PP), ante la renuncia a su acta de concejal del portavoz municipal de IU-CA, José Manuel García, ha criticado que el edil dimisionario "cargue la responsabilidad a los funcionarios" municipales, en alusión a la tesis de García en cuanto a que los contratos por los que han sido imputados fueron licitados por el servicio de Contratación del propio Ayuntamiento y adjudicados por una mesa técnica de contratación única también adscrita al Consistorio.
García, como hemos informado, ha anunciado este viernes su decisión de renunciar a su acta de concejal como consecuencia de su imputación por presuntos delitos de fraude y cohecho a manos de la juez Mercedes Alaya, que a través de la operación Enredadera investiga una red de sobornos a funcionarios y responsables públicos a cambio de contratos públicos en favor de la empresa sevillana Fitonovo. En la causa figuran también como imputados el exprimer teniente de alcalde del Ayuntamiento Antonio Rodrigo Torrijos (IU-CA); el antiguo asesor de éste Antonio Miguel Ruiz Carmona; el exconcejal del PP Joaquín Peña; el exedil del PSOE Manuel Gómez Lobo; el exasesor socialista Domingo Enrique Castaño; el exjefe del servicio de Parques y Jardines del Ayuntamiento Francisco Amores; Francisco Luis Huertas, jefe de mantenimiento del Parque María Luisa; o el funcionario de la Diputación de Sevilla Carlos Podio.
Beltrán Pérez ha considerado "lógica" la dimisión de García y la ha conectado con el "pasado de ruina y corrupción" del Ayuntamiento de Sevilla, pues José Manuel García dirigió el área de Deportes durante el pasado mandato, en el que PSOE e IU-CA gobernaban la ciudad. "El pasado de la ciudad aparece constantemente como presente y hoy la actualidad está marcada por la imputación de un segundo portavoz municipal de IU-CA", ha dicho recordando que Antonio Rodrigo Torrijos ya renunció a su acta de concejal a cuenta de su papel en una causa judicial previa a la imputación en la trama investigada a través de la operación Enredadera.
A su juicio, la "inestabilidad" del grupo municipal de IU-CA es fruto de "lo que ocurrió en esta ciudad con una gestión bajo principios de interés propio y corrupción". En cuanto a los argumentos de García, según el cual los contratos por los que habría sido imputados fueron licitados por el servicio de Contratación del propio Ayuntamiento de Sevilla y adjudicados por una mesa técnica de contratación única también adscrita al Consistorio, no por el área de Deportes, considera Pérez que "no es de recibo intentar desviar la atención o cargar la responsabilidad a los funcionarios de esta casa". "Los responsables políticos tomaron decisiones que pueden ser consideradas delitos de corrupción y ni la mesa de contratación ni los funcionarios que instruyeron los expedientes son conocedores de las relaciones que pueda haber, ni de contraprestaciones o asuntos de esa naturaleza", ha asegurado.
Así, ha opinado que García "tiene que asumir su responsabilidad, la de su partido y la del Gobierno anterior de PSOE e IU-CA", defendiendo que el "presente" de Sevilla es "la honestidad, la limpieza y la gestión para los intereses de todos los ciudadanos" que marca el Gobierno municipal del popular Juan Ignacio Zoido.
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