La Obra Social la Caixa invierte 191.900 euros en dos proyectos de la Fundació General de la Universitat de València (UV) y del Centro de Estudios Rurales y de Agricultura Internacional (Cerai) para mejorar las condiciones de vida de poblaciones vulnerables de Burkina Faso y Mauritania.

Según ha informado la entidad en un comunicado, el director territorial de la Caixa en Levante y Murcia, Bibiano Martínez, ha firmado un acuerdo de colaboración con el rector de la UV, Esteban Morcillo, y el director del Cerai, David Torres, por el que aportará 191.900 euros a las dos entidades para el desarrollo de comunidades vulnerables de Burkina Faso y Mauritania.

Esta colaboración se enmarca en los proyectos de formación en gestión económica que impulsa el Área Internacional de la Obra Social la Caixa en África, a través de ONG españolas.

El objetivo es reforzar las capacidades de las poblaciones en riesgo de exclusión en el ámbito productivo y contribuir así a que puedan salir de la precariedad, indican las mismas fuentes.

Con el proyecto de la Fundació General de la UV y Obra Social la Caixa, se impulsará la formación de mujeres emprendedoras del ámbito rural en Burkina Faso, a través de la Association pour la Promotion Fémenine de Gaoua (APFG), en la provincia de Poni/Gaoua.

Este programa persigue capacitarlas para que puedan llevar a cabo actividades económicas generadoras de beneficios para reducir los niveles de pobreza y mejorar las condiciones de vida de las familias.

Se dirigirá a "mujeres líderes", miembros de APFG y que ya participan en actividades productivas como elaboración de mantequilla de karité o cerveza tradicional, fabricación de jabones y cremas, tintado de teles, cestería y horticultura. Con la formación recibida, adquirirán mayor calificación para mejorar su actividad y formar a otras compañeras. Se beneficiarán cerca de 700 mujeres.

En cuanto al proyecto con Cerai, prevé mejorar la gestión económica de productores familiares individuales o socios de hasta ocho grupos de intereses comunes de producción y comercialización hortícola de la Wilaya de Trarza (Mauritania).

Sus técnicos y cooperantes trabajarán en áreas como fortalecer capacidades de gestión económica, organización y oferta de servicios de los distintos miembros de los grupos beneficiarios.

El proyecto afronta "una de las mayores causas de pobreza de Mauritania, la falta de soberanía alimentaria", y considera clave el refuerzo de conocimientos y capacidades de 20 agentes de desarrollo local de la zona, orientados al trabajo con los actores de la cadena de valor de productos hortícolas, así como en la difusión de resultados, edición de material didácticos y sensibilización.

Según las mismas fuentes, es uno de los países más pobres del mundo y el más afectado del Sahel por la sequía y la desertificación, con una climatología extrema agravada por el cambio climático. En la actualidad, produce el 30 por ciento de los alimentos que consume y explota un 20 por ciento de las tierras potencialmente cultivables.

En la actualidad, la mayoría de agricultores producen para autoconsumo y no llegan a cubrir las necesidades básicas familiares y los ingresos provienen de trabajos jornaleros o de las remesas.