Unanimidad contra Hereu. El actual alcalde ha optado por la vía rápida para que el Estado proceda a la cesión del castillo de Montjuïc, una reivindicación que se eternizaba y podía dañar la imagen socialista. Una acción que, si bien le reportará réditos electorales, le ha granjeado las críticas de todos los partidos en liza.Jordi Hereu, ya como alcalde, anunció que el equipamiento se integrará en el plan director y que se consolidará como puerta de entrada al parque, sin descartar la inclusión de un centro para la paz.
El candidato de CiU, Xavier Trias, alertó de la posible trampa del presidente Zapatero al eludir «un pacto que se debía hacer a través de la ley».
Críticas del tripartito
Los actuales socios de gobierno tripartito del candidato socialista también han criticado las formas de Jordi Hereu. Así, Jordi Portabella (ERC) criticó a Hereu por atribuirse una reivindicación histórica.
Imma Mayol (ICV), tras criticar el «regalo de Zapatero a su colega», aprovechó para pedir la protección de toda la montaña de Montjuïc como reserva natural.
El alcaldable del PP, Alberto Fernández Díaz, advirtió sobre las condiciones de la cesión (la obligación de ondear la bandera), lo que no sucede en edificios municipales.
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