La Conselleria de Agricultura, Ganadería, Pesca, Alimentación y Medio Natural de la Generalitat ha arrancado este año en Lleida 71 hectáreas de frutales afectadas por los focos de fuego bacteriano, más del doble que en 2013, cuando fueron 31, ha informado la Conselleria en un comunicado.

El director general de Agricultura y Ganadería de la Conselleria, Miquel Molins, ha facilitado estos datos en la reunión de la Mesa Sectorial de la Fruta Dulce, este lunes en el Centro de Mecanización Agraria, en Lleida.

La campaña actual se ha saldado con 27 focos, de los cuales 15 son los mismos que el año pasado; de estos focos de 2013, siete no han mostrado resultados positivos en la campaña de este año y ocho sí.

En el encuentro, además de otros representantes del departamento, han participado representantes de Unió de Pagesos, Jóvenes Agricultores y Ganaderos de Catalunya (JARC), ASAJA-AEALL, la Federación de Cooperativas Agrarias de Cataluña (FCAC), la Federación de Agricultores viveristas de Catalunya, y Afrucat.

Ante este aumento de hectáreas afectadas, la Conselleria ha planteado dos alternativas para la estrategia contra la lucha del fuego bacteriano: la primera, salir de la zona protegida, pasando a convivir con la enfermedad y, la segunda, seguir siendo zona protegida, pero revisando la cuantía de las indemnizaciones y reforzando las actuaciones de prospección, que ha sido la opción elegida.

Para definir las medidas de la estrategia, el sector y la Conselleria han decidido crear un grupo de trabajo del que formarán parte, además del Govern, representantes de las principales organizaciones del sector.

Cosecha de fruta dulce

La Generalitat también ha presentado el balance de cosecha de fruta dulce de la campaña 2014 en Catalunya, donde se ha constatado una tendencia al alza en cuanto a la producción de fruta de hueso y de manzana y a la baja en pera, a al igual que en el resto de la Unión Europea (UE).

El cierre del mercado ruso a principios de agosto ha marcado negativamente la campaña, y actualmente está influyendo en la comercialización y en los precios, especialmente en melocotón y nectarina, que durante los meses de julio y agosto han registrado una importante caída.

Sin embargo, según la Conselleria, las exportaciones catalanas a 31 de agosto muestran unos valores positivos, dado el buen comportamiento que han tenido hasta julio.