Los cuerpos (se pueden ver cuatro en las fotografías captadas y publicadas por 20 minutos hace una semana), fueron retirados el pasado miércoles, cinco días después de que falleciera una osa parda, según datos de la propietaria Parques Reunidos. Lo que no aclara la empresa es cuántos días llevaban los restos de un bisonte ya descompuesto (en la foto) que, según indicaron varias fuentes a este periódico, murió hace casi dos meses.

Aún falta el Seprona

Sin embargo, la Junta no descarta una sanción si el Seprona, que aún investiga, detecta irregularidades en la recogida de animales muertos.

Los ganaderos

La normativa obliga a los dueños de animales a llamar una empresa de recogida de cadáveres cuando hay una muerte. Éstas tienen un plazo de 48 horas para hacerlo, aunque según el gerente de la cooperativa de ganaderos de Valladolid, Juan Sopena, «suelen tardar menos».

«La mayoría tenemos un seguro para cubrir este gasto. Además, si no avisamos hay sanciones muy elevadas (entre 600 y 3.000 euros). Lo mismo que si se nos escapa una oveja y aparece muerta en el monte. Si la identifican, la culpa es nuestra y en los últimos años está muy vigilado».

«Han pasado casi dos meses»

La Junta justifica su decisión de no sancionar a Valwo en que la osa parda llevaba cinco días muerta, algo más de lo normal, pero provocado por un retraso en la recogida del cadáver por parte del Museo Anatómico. Sin embargo, pasa por alto que otro animal, cuyos huesos se ven en la fotografía, llevaba muerto casi dos meses, según ha podido saber 20 minutos y ha constatado la profesora de Anatomía de la Facultad de Veterinaria de la Universidad Complutense de Madrid, Pilar Marín. «Para que se haya descompuesto así han pasado casi dos meses. No sé qué animal es, pero por el tamaño, sí podría ser un bisonte».