El coronel jefe de la Guardia Civil de Cantabria, Juan Airas, se daría "por contento" con conseguir mantener el bajo nivel de delincuencia actual, un objetivo "muy difícil" dado que la tasa de criminalidad en la Demarcación, que engloba toda la región salvo Santander y Torrelavega, se sitúa en 23,9 infracciones penales por mil habitantes, muy por debajo de la del conjunto de Cantabria (29,1), que a su vez es la tercera más baja del país, y a gran distancia de la media nacional (46,1) y de la europea (67,8 infracciones).

Con una plantilla de 1.300 agentes que apenas ha aumentado en los últimos años, Airas reconoce que los recursos humanos y materiales "nunca son suficientes" y aboga por "optimizarlos" profundizando en la coordinación con otros organismos, que "ya la hay pero siempre se puede mejorar".

De cara a esa optimización, el coronel jefe de la Guardia Civil considera que sería "conveniente" reagrupar algunos cuarteles, pero lo descarta por el rechazo que generaría esta medida a nivel social y político en los municipios que perdieran su cuartel. "Seguro que habría manifestaciones en contra", ha aseverado.

Airas ha hecho estas reflexiones durante el encuentro que ha mantenido este viernes con los medios de comunicación en el cuartel de Campogiro, el primero desde su toma de posesión como coronel jefe de la Guardia Civil en Cantabria.

En él ha repasado la situación de la delincuencia en la Demarcación, que engloba al 60% de la población de Cantabria (70% en verano), y en la que en 2013 se registraron 8.610 infracciones penales (delitos y faltas), la mayor parte en la zona costera y sólo el 20% en los valles interiores. Aproximadamente el 70% son delitos contra el patrimonio.

La zona costera oriental concentra el 32,77% de las infracciones y es "la más complicada", junto con el arco metropolitano de Santander (Astillero, Camargo, Bezana, Medio Cudeyo y Ribamontán al Mar), que concentra el 20,1% del total, con Castro Urdiales y Camargo a la cabeza, respectivamente. El área de influencia urbana de Torrelavega concentra el 9,14% de las infracciones, con "un pico importante" en verano por la afluencia turística en municipios como Miengo, Suances y Santillana.

Robo de cobre

La Guardia Civil tiene 35 planes operativos especiales, algunos de carácter temporal como el de lucha contra los incendios, y otros en vigor con carácter permanente, como es el caso del plan de lucha contra el robo de cobre, que en lo que va de año ha permitido esclarecer 82 delitos de esta naturaleza de los 128 en total que se han registrado en 49 municipios.

El balance es de 50 detenciones, cifra que hoy mismo se ha incrementado con la detención de cinco rumanos residentes en Cantabria, algunos de ellos mujeres. La Guardia Civil les imputa robos de cobre en Camargo, Ampuero, Reinosa, Guarnizo, Gornazo y Riotuerto.

Preguntado si algunos de esos robos son los que han dejado sin teléfono a buena parte de los vecinos de Escobedo de Camargo, Airas ha señalado que de momento se está todavía investigando, y ha anunciado que "posiblemente dentro de nada haya tres o cuatro detenidos más".

Sobre los robos en viviendas, ha señalado que normalmente son sin violencia o intimidación, y ha recomendado a las familias que adopten medidas de seguridad pasivas, porque "hay poca delincuencia de este tipo y la gente nunca piensa que les va a pasar a ellos".

Por otro lado, la Guardia Civil viene detectando un aumento de las estafas por Internet, y de la "picaresca" de denunciar pérdidas como hurtos, no así de los delitos de violencia doméstica, a los que según Airas se está dando una respuesta policial y judicial "muy rápida".