La Conselleria de Educación comprará más de 300.000 libros para crear un fondo bibliográfico en los centros y poder adjudicar cada año estos materiales a los alumnos con menos recursos, según ha informado la Generalitat en un comunicado.

Al finalizar el curso, los depositarios de los libros deberán devolverlos al fondo del centro para su guarda y custodia y su entrega el curso siguiente a otros alumnos.

El presidente de la Generalitat, Alberto Fabra, anunció el pasado martes en el Debate de Política General que Educación recuperará las ayudas para la compra de libros. Se trata de establecer un nuevo sistema de becas para la adquisición de libros de texto, basado en la compra de un fondo de libros a los centros escolares valencianos.

El objetivo es "apoyar a las familias con menos recursos en la compra de material escolar y aliviar la carga económica que supone para éstas afrontar el inicio del curso".

Esta política de bancos de libros ya se está realizando en centros CAES y de Educación Especial y beneficia actualmente a 13.000 alumnos de la Comunitat.

Asmimismo, la Conselleria ha impulsado otras medidas para fomentar el ahorro en la compra de libros de texto al ampliar la vigencia de los libros de texto de Primaria de cuatro a seis años, alargando su vida útil o con la plataforma online de intercambio de libros, denominada Llibrei.

Otra de las líneas de actuación son las deducciones fiscales por la compra de material escolar. En este sentido, las familias han podido deducirse, por primera vez en la campaña de la renta de 2013, la compra de libros para sus hijos.

Además, Educación está fomentando la elaboración de materiales didácticos y curriculares propios en cada centro, con el fin de que las familias no tengan que adquirir material escolar.