El universitario, natural de Logroño, detenido el martes por cinco apuñalamientos en Lleida, producidos el día anterior, se entregó al policía local que había delante de su casa diciéndole: "soy la persona que ha acuchillado a toda esa gente y quemé mi casa. Quiero confesarlo todo".

El intendente jefe de la Policía Local, Josep Ramon Ibarz, y el intendente jefe de la comisaría de Mossos de Lleida, David Boneta, han explicado este viernes en rueda de prensa la detención y las horas anteriores que vivió el detenido, al que prevén poner a disposición judicial este mismo viernes.

El estudiante de tercero de Medicina de 21 años, Alejandro R.V., cometió los cinco apuñalamientos el lunes, deambuló toda la noche pasando por las poblaciones de Algerri, La Portella y Almenar, entre otros, y acabó en Balaguer.

El martes, en Balaguer, entró en una cafetería sobre las 17.00 —casi 24 horas después de los hechos—, tomó un café y pidió un taxi para volver a su casa, donde decidió entregarse confesando, como corroboró después ante los Mossos, según han explicado los policías.

La policía autonómica le atribuye cinco homicidios en grado de tentativa y uno de daños por el incendio de su domicilio, con un posible agravante de ideología xenófoba —además, en su piso encontraron libros de ideología neonazi y dibujos en la pared con simbología xenófoba—.

Todos fuera de peligro

Dos de las cinco víctimas están dadas de alta, otras dos están en el hospital Arnau de Vilanova de Lleida y una en el Vall d'Hebron de Barcelona —todas, fuera de peligro—.

El intendente de Mossos ha explicado que en la operación ha habido coordinación con la Policía Local, y el intendente de la Local ha añadido que también ha habido colaboración del Cuerpo Nacional de Policía.