El exsecretario general de UGT en Andalucía Manuel Pastrana ha interpuesto una querella contra los organizadores de una marcha contra la corrupción en las instituciones que se desarrolló el pasado 8 de febrero y que terminó en la sede regional del sindicato, donde se leyó un manifiesto y de forma simbólica se depositaron langostinos podridos en las puertas del sindicato.

Fuentes del caso han informado a Europa Press de que, precisamente, el Juzgado de Primera Instancia número 12 de Sevilla ha celebrado este martes el acto de conciliación, en el que Pastrana ha decidido retirar la querella contra Foro Sevilla Nuestra, organizadora de la marcha, aunque la ha mantenido contra el anterior presidente de esta organización y actual coordinador de Vox en Sevilla, Javier Cortés.

Unas 60 personas se han concentrado en la puerta de los juzgados de Viapol donde se estaba celebrando el acto de conciliación para protestar contra la petición de Pastrana, ya que la libertad de expresión "debe ser defendida por encima de intereses tan miserables como los que han llevado a cometer por parte de destacados sindicalistas y miembros de la Administración socialista de la Junta el mayor saqueo a que se han sometido los dineros públicos en España".

Según las fuentes, Pastrana ha reclamado estos 10.000 euros después de que su imagen apareciera, "entre otras figuras políticas nacionales de todo color político", en la convocatoria de la manifestación que hasta las puertas de UGT-A llevó el Foro Sevilla Nuestra, "acompañado de un numeroso grupo de ciudadanos ajenos a cualquier sigla política, pero profundamente indignados por la actitud estafadora de tantos como dicen defender al pueblo, a los mas débiles y a los más necesitados".