"El estado de los dos millones de árboles de la ciudad es el adecuado, la valoración es positiva y el mantenimiento es el que recomiendan los expertos". Diego Sanjuanbenito, concejal de Medio Ambiente del Ayuntamiento de Madrid defendió así este martes que era "imposible" anticiparse a la rotura de la rama que este lunes mató a un hombre en Santa Eugenia (Villa de Vallecas), el segundo caso en lo que va de verano.

Según el edil, solo "mala fortuna" puede explicar lo sucedido. Sin embargo, la oposición, los trabajadores municipales, los expertos y los sindicatos tienen su explicación: una gestión deficiente. Es más, según algunos especialistas, Madrid tiene que dotarse de un plan director para gestionar su masa verde.

El calor y la sequedad del verano influyen en la masa forestal. "El árbol sufre el 'efecto manguera'. Cuando absorbe agua, la tensión hace que la rama se mantenga estable. Si, debido al calor, las hojas evaporan más líquido del que el ejemplar es capaz de absorber, la rama se dobla y puede partirse", precisa Mariano Sánchez, jefe de Horticultura del Jardín Botánico y miembro de la comisión designada por el Ayuntamiento para estudiar este fenómeno.

"El ulmus pumila (u olmo de Siberia) que tenemos en las calles de las ciudades europeas es un árbol inadecuado. Se optó por él porque resistía mejor el hongo de la grafiosis, pero es de crecimiento rápido y vida corta. Hay métodos tecnológicos para saber cuándo un árbol sin síntomas externos está dañado o podrido, pero no es viable aplicarlos al arbolado viario de sombra", precisa el experto del Botánico.

Sergio Fernández, ingeniero de Montes, apunta que las podas drásticas realizadas en el pasado han afectado a las ramas. "Además, se han hecho trabajos de debilitamiento para que produzcan menos hojas, de forma que las contratas municipales responsables de la limpieza se ahorran tiempo y dinero en limpiarlas cuando caen al suelo en otoño", añade un trabajador municipal. Según el Consistorio, En el ejercicio 2013-2014 se han realizado 14.327 podas, un 60% más, mientras que el número de talas ha sido de 2.064, un 236% más. "Normal, en 2012 y 2013 se redujeron porque el servicio estaba pendiente de adjudicación y querían ahorrárselo", advierte Juan Carlos Nicolás (CC OO).

El Consistorio unió los servicios de limpieza viaria y mantenimiento de zonas verdes en un solo pliego que adjudicó en el verano de 2013 a cuatro empresas (OHL, Cespa, Valoriza y la UTE FCC-Alfonso Benítez) por 1.943 millones de euros y un período de 8 años. El ahorro sobre el contrato anterior, según las cuentas municipales, ascendería a 629 millones. " Con tantos millones menos, no se pueden hacer milagros y se ha recortado en personal, que supone el 80% del gasto", sentencia Nicolás.

Las adjudicatarias han puesto en marcha un expediente de regulación temporal de empleo (ERTE) de 45 días por año. Los sindicatos y el grupo municipal de IU calculan que la reducción de horas de trabajo equivale a la presencia de 228 trabajadores menos en las calles cada día. "Hay menos personal dedicado a las labores de mantenimiento diario y también hay menos técnicos para revisar el estado del arbolado. Si la plantilla estuviera al completo se podrían detectar a tiempo los árboles enfermos y tomar medidas", explica Roberto Tornamira, secretario general de la Federación de Servicios de UGT.

Antes del nuevo contrato, el mantenimiento de los árboles de alineación (los situados en las calles para dar sombra) era competencia exclusiva de la empresa Valoriza. El nuevo sistema integral dividió el servicio en lotes y lo adjudicó por zonas, haciendo que los trabajadores de cada contrata tengan que realizar varias funciones a la vez. "Además de cuidar los árboles, deben arreglar el mobiliario urbano, limpiar las calles y mantener los parques infantiles. Abarcando tantos frentes no se puede atender adecuadamente los árboles", apunta Cándido Rodríguez, responsable de Jardinería en CC OO.

Los jardineros municipales afirman que el trabajo constante de prevención y revisión, con presencia permanente en las calles, ha sido sustituido por el de las cuadrillas de trabajadores: "Ahora salen brigadas que solo pueden atender lo más urgente. Se trabaja a la carrera. Hay menos personal y así es imposible hacer una labor decente". El concejal de Medio Ambiente aseguró que la rama que se desprendió en Vallecas había sido revisada el pasado 18 de agosto. Carrión Sánchez, vocal de la Asociación de Vecinos del barrio, cree que las podas son mucho menos frecuentes en la zona.

La ciudad precisaría de un plan de gestión que consistiría, en parte, según Mariano Sánchez, en gestionar las alineaciones y retirar los árboles una vez alcanzada su edad madura (momento en el que empiezan a acumular riesgo) y sustituirlos progresivamente por ejemplares jóvenes. También incluiría unos criterios de tipología y altura máxima a la hora de plantar árboles en zonas de pradera para asegurar su estabilidad. La inversión inicial sería elevada, pero el experto cree que saldría rentable: "A medio y largo plazo es beneficioso, porque te olvidas del árbol durante 15 o 20 años y no habría que estar enviado brigadas continuamente".

El concejal de Medio Ambiente anunció este martes como medida de urgencia la elaboración de un inventario que incluya una ficha, datos e imágenes de cada árbol de la ciudad. Sin embargo, este catálogo ya está presupuestado y figuraba como una de las obligaciones que deben cumplir las nuevas adjudicatarias de jardinería, por lo que no constituye ninguna novedad. También aseguró que se intensificará la vigilancia por la "tranquilidad" de los vecinos, a pesar de insistir en que la gestión actual es correcta.