El Banco de Alimentos de Jaén cuenta ya con una cámara frigorífica gracias a la cual podrá gestionar productos perecederos para su distribución entre quienes más lo necesitan, algo que "hasta ahora en muchas ocasiones no se podía hacer" al carecer de equipamiento para tratarlos adecuadamente.

Así lo ha destacado este martes a Europa Press su presidente, Diego Valero, quien ha reiterado un llamamiento a la colaboración ciudadana para costear esta nueva instalación que alberga ya la nave que la fundación posee en la calle Villatorres del Polígono de los Olivares, en la capital.

Y es que, según ha destacado, "es un esfuerzo que merecen quienes más lo necesitan" y se ha hecho sin contar con los aproximadamente 36.000 euros en los que está valorada la cámara. "Si no, no sale. Hemos arriesgado con la confianza también de que la gente de Jaén es muy solidaria", ha explicado para añadir que en agosto, "con mucha gente fuera" por la vacaciones, apenas se han registrado ingresos y "sigue siendo necesaria" esa implicación.

De este modo, aquella persona o entidad que quiera colaborar puede realizar su donativo, "por pequeño que sea", en el número de cuenta ES53 0182 6836 88 0201698685. Su colocación hará posible una mayor capacidad de gestión de productos, ya que "lamentablemente, se mantiene la demanda" y "cada día es mayor la solicitud de alimentos frescos".

La nueva cámara va a permitir, por tanto, recibir, conservar y repartir en buen estado los alimentos perecederos que donan diariamente diversas empresas de Jaén y provincia, así como los que entran del programa Europeo de retiradas de frutas y hortalizas, "incrementando lo que se asigne como consecuencia del veto de Rusia a los productos de la Unión Europea".

Además, para carnes, pescados, marisco y cualquier otro alimento que lo necesite se ha instalado una cámara de congelación, según ha precisado Valero, quien ha señalado que, para el transporte, el Banco de Alimentos dispone de tres vehículos con cámaras frigoríficas que impide la ruptura de la cadena de frío de los alimentos.

Al montaje de esta cámara frigorífica se dedicarán, entre otros donativos, los aproximadamente 3.000 euros que un joven jiennense, Emilio Revuelta, consiguió recaudar en el marco de su recorrido a pie entre los 1.150 kilómetros que separan las catedrales de Jaén y Santiago de Compostela a través del Camino Mozárabe.