Las fuerzas de seguridad iraquíes, junto con las tropas kurdas, y con el respaldo de la aviación iraquí y de EE UU, han logrado este lunes retomar el control de la estratégica presa de Mosul (norte), que estaba en manos del Estado Islámico, informó el canal oficial de televisión, Al Iraquiya.

El portavoz de las Fuerzas Armadas iraquíes, el general Qasem Atta, dijo en declaraciones difundidas por este canal que "fuerzas antiterroristas (iraquíes) y tropas 'peshmergas' (kurdas), con apoyo aéreo mixto (iraquí y estadounidense), han limpiado la presa de Mosul del EI por completo". "Las fuerzas iraquíes han izado la bandera (de Irak) en la presa", añadió Atta, sin dar mayores detalles, en lo que constituye un gran avance en la provincia de Nínive, cuya capital es Mosul.

El domingo por la noche, las fuerzas kurdas recuperaron el 60% de la instalación hidráulica de Mosul después de violentos ataques con los yihadistas, que se hicieron con la presa el pasado 7 de agosto, tras retirarse de ella fuerzas kurdas. Además, una fuente de los "peshmergas" dijo también que sus tropas lograron retomar, con cobertura estadounidense, el control de las aldeas de Jatara, Batnaya, Tel Adas, Almanara, Baqufa y Telesqof, en su avance hacia la zona de Telquif.

La secretaría de Estado de EE UU anunció este domingo que sus fuerzas lanzaron 14 bombardeos sobre objetivos en los alrededores de la infraestructura y lograron destruir varios vehículos usados por los combatientes del EI.

La presa está ubicada a tan solo 25 kilómetros de Mosul, capital de la provincia de Nínive, y a 23 de la ciudad de Dohuk, en la región del Kurdistán iraquí, y se considera como una de las más importantes instalaciones estratégicas en Irak, y constituía una amenaza importante para las ciudades iraquíes en caso de producirse un colapso de la misma, ya que está situada en suelo arenoso, por lo que necesita de una continua inyección de cemento.