El mayoral de los Danzantes de Huesca, Pascual Campo, ha agradecido el recibimiento que han tenido en la localidad francesa de Tarbes, en su primer baile fuera de Huesca en 29 años, donde han actuado este domingo, de forma excepcional, en las fiestas de ese municipio galo con motivo del cincuenta aniversario del hermanamiento de ambas ciudades.

Es la segunda vez que los danzantes bailan en el extranjero, tras el viaje a Roma en 1985 para visitar la tumba de su patrón en la iglesia San Lorenzo Extramuros. Una representación de 19 miembros, con cuatro cuadros de danzantes, el mayoral y el ratapán han participado en el desfile final de fiestas.

Pascual Campo ha observado que esto no abre la puerta a la proliferación de actuaciones fuera de la ciudad y de San Lorenzo, ya que los estatutos así lo determinan. Según ha dicho, "ha estado muy bien, muy emocionante, ha sido un gran acogimiento, pero los estatutos así lo marcan y esto se hace de forma muy excepcional".

En cualquier caso, "quiero agradecer la buena acogida y lo que han agradecido que fuéramos porque saben que no salimos de Huesca y de las fiestas de San Lorenzo", ha reiterado.

Así, en sus estatutos se especifica que la agrupación no participa en festivales ni concursos fuera de la ciudad y que rara vez realiza una actuación fuera de las fiestas laurentinas.

Zaragoza, Binéfar, Barcelona o Buñol han sido algunos de los pocos lugares donde han actuado fuera de su marco habitual. El último baile al margen de las fiestas de San Lorenzo se realizó el 23 de abril de 1991, con motivo de la inauguración del Monumento al Danzante, en la avenida de los Danzantes de Huesca.