Diecisiete muertos en un atentado contra el viceprimer ministro iraquí

  • Salam al Zubai fue trasladado de inmediato al hospital.
  • Las informaciones sobre el atentados son confusas, pero apuntan a que las heridas de Zubai son graves.
  • El atentado fue perpetrado por un suicida, al que se sumó un coche bomba..

Diecisiete personas han muerto en un atentado dentro de una mezquita de Bagdad dirigido contra el viceprimer ministro iraquí Salam al Zubai, quien resultó herido, según la televisión oficial Al Iraqiya.

Al Zubai está siendo operado en un hospital militar norteamericano, dijo el portavoz del plan de seguridad de la capital, Qasam al Musawi, que no desveló la gravedad de sus heridas.

Otras 15 personas resultaron heridas, según la emisora televisiva.

Informaciones confusas

Las informaciones sobre el atentado han sido confusas, pues en un principio se dijo que estaba grave y más tarde que solo sufría heridas leves, aunque finalmente las consecuencias parecen más graves, pues está siendo sometido a una operación quirúrgica.

El atentado se produjo dentro de la mezquita donde Al Zubai se encontraba rezando la oración del viernes, conocida como Kerradet Mariam, en el centro de Bagdad.

Un terrorista suicida se introdujo en la mezquita, supuestamente con algún explosivo adosado al cuerpo, y lo detonó dentro del templo, causando un gran número de muertos, en especial entre los guardaespaldas encargados de la protección del viceprimer ministro.

Coche bomba

Según dijo Al Musawi, a la explosión causada por el suicida se añadió además la de un coche bomba que estaba aparcado en las inmediaciones.

Se desconoce la filiación que puede tener el terrorista, pues el atentado pudo haber sido obra tanto de grupos chiíes como de correligionarios suníes descontentos con su participación en el Gobierno.

El viceprimer ministro pertenece a un grupo suní moderado, el Frente del Consenso Iraquí, el mayor de esta comunidad, que cuenta con 44 diputados en el parlamento de 275 escaños.

Fuerza insurgente

Ayer, los grupos insurgentes dieron muestra de su fuerza  con el atentado que perpetraron a solo 50 metros del lugar donde el secretario general de la ONU, Ban Ki-moon, y el primer ministro iraquí, Nuri al Maliki, celebraban una rueda de prensa.

El atentado causó una enorme sacudida en la sala donde se celebraba la rueda de prensa.

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