Los otros 1,7 millones se destinaron a cambio de vidrios, de plafones y otros desperfectos. El metropolitano ha puesto ventanas con un material para evitar rayadas. Aun así, el problema no se ha podido erradicar.

Tren destrozado

Estos datos sólo se refieren al metro de Barcelona, pero la red de Renfe tampoco se libra de los actos vandálicos. El último caso conocido salió a la luz pública ayer.

Cuatro mossos detuvieron el pasado viernes a las 21.30 h a 16 jóvenes mientras destrozaban un vagón de un tren de Cercanías en la estación de Renfe Sabadell Centre. Sólo dos tenían los 18 años cumplidos: Antoni C. V., vecino de Cornellà, y Alejandro M. G., de la misma edad, natural de Barcelona. Se les acusa de delitos de desórdenes públicos y daños.

Por valor de 5.000 euros

El acto vandálico se saldó con siete cristales exteriores dobles rotos y una gran cantidad de desperfectos en el interior del convoy (por ejemplo, las dos puertas de separación de los vagones). Repararlo todo valdrá un total de 5.000 euros.

Los chicos se habían subido al tren en Barcelona y se dirigían a Terrassa.

Dos años por pintar en una plaza

El fiscal pidió ayer dos años de cárcel para un joven acusado de pintar unos graffitis en una plaza y en una parada de metro cercanos a la Sagrada Família. El hombre se enfrenta a una multa de 800 euros por unos hechos que cometió, presuntamente, el 6 de mayo de 2005. La policía se incautó de una mochila con diversos botes de spray y rotuladores. El detenido se excusó diciendo que iba a pintar «una pared en casa de un amigo».