El Alto Comisariado del Gobierno para la Marca España, Carlos Espinosa, ha asegurado que el "problema" de Cataluña y su escalada independentista "afecta más a la economía de esta Comunidad Autónoma" que a la del resto del país, porque su situación política introduce elementos de "incertidumbre" en las estrategias inversoras y en empresas que están "a la espera".

Según Espinosa las circunstancias políticas de Cataluña son "un elemento de inquietud" para los que tienen pensado invertir a corto o medio plazo en la región, porque antes de realizar una inversión económica necesitan saber "cuál es el camino que se va a tomar" ya que "el inversor no quiere elementos de incertidumbre" a la hora de arriesgar su dinero.

Por ello cree que los "intentos de segregación" en el marco de Europa "se ven ridículos" ya que, a su juicio, hay que seguir avanzando en la construcción del proyecto común europeo en lugar de plantear la separación de los territorios, ha señalado en alusión a las ventajas que ha supuesto la Unión Europea respecto a la moneda única o el libre tránsito de personas y mercancías.

No obstante, Espinosa ha defendido que en Cataluña, "afortunadamente", hay gente que "se siente muy española", porque "una cosa son las personas y otra las instituciones", pero esa circunstancia "está un poco tapada y borrada por una acción sistemática de las instituciones catalanas que buscan ese enfrentamiento y esa segregación de España", ha subrayado.

"Las Ramblas son tan mías como del señor Mas y la Sagrada Familia también nos corresponde una parte a todos los españoles", ha manifestado el responsable de Marca España en una entrevista concedida a Europa Press minutos antes de participar en Cáceres en el coloquio internacional 'La luz al servicio del hombre', donde ha hablado de la importancia de la internacionalización de las empresas españolas como una salida a la crisis económica.

Salvar a las empresas

Respecto a este tema Espinosa cree que, una vez copado el consumo interno, son los mercados exteriores y la exportación los que pueden "salvar" a muchas empresas españolas y no solo las grandes, sino también las pymes, que configuran el 90 por ciento del tejido productivo español, porque se pueden convertir en proveedoras de las otras.

"Si una gran constructora va a Chile a hacer una autopista necesita cemento y otros muchos materiales que pueden conseguir de proveedores más pequeños", ha puesto a modo de ejemplo al tiempo que insiste en que "las pymes pueden acceder al mercado exterior acompañando a las grandes firmas".

En este punto ha mencionado empresas de diversos sectores como la moda, la construcción o las nuevas tecnologías que configuran ese conglomerado que se llama Marca España porque han conseguido colocarse en el mapa mundial y crear una demanda de productos a la vez que difunden las capacidades industriales del país.

Así, ha recordado que en lo referente a la construcción, hay empresas españolas que están realizando ahora mismo seis de las diez grandes obras civiles repartidas por todo el planeta, o que el país se ha posicionado en las primeras filas de éxitos deportivos en varias disciplinas. "Todo eso es la Marca España junto al turismo, a la gastronomía o la cultura", ha indicado.

"Se trata de aumentar el grado de conocimiento que se tiene del país en el resto del mundo y difundir los efectos positivos y las capacidades tecnológicas de las empresas españolas", ha señalado.

Cabe recordar que el Alto Comisariado del Gobierno para la Marca España ha sido uno de los ponentes que han participado este miércoles en la última jornada de un encuentro internacional organizado por el Gobierno de Extremadura y la Academia Europea de Ciencias, Artes y Letras (Aesal) que tiene lugar en la iglesia de la Preciosa Sangre de Cáceres, en pleno casco antiguo de la ciudad.

El congreso ha contado con expertos nacionales e internacionales que han debatido sobre diversos temas teniendo como protagonista la importancia de la luz y sus diversas aplicaciones en conceptos artísticos y científicos.

La Academia Europea de Ciencias, Artes y Letras celebra anualmente un coloquio, en el que cada año elige una temática diferente. Así, por ejemplo en 2012 este encuentro se celebró en Dublín (Irlanda); en 2013 en París (Francia), y en 2014 ha sido la ciudad de Cáceres la sede elegida para llevarlo a cabo.