El desembarco del motor chino en Europa ya está aquí

El Qoros 3 Sedán es el coche con el que la firma china quiere conquistar a Europa.
El Qoros 3 Sedán es el coche con el que la firma china quiere conquistar a Europa.
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El Qoros 3 Sedán es el coche con el que la firma china quiere conquistar a Europa.

China está muy presente en nuestras vidas desde hace años. Los chinos producen y nos venden todo tipo de productos, desde su país y también a la vuelta de cualquier esquina, pero generalmente los asociamos a bajo precio, escasa calidad y apenas garantías.

Ha sido una constante durante años y, variarlo, un obstáculo insalvable para los fabricantes de automóviles chinos que ni se planteaban vender en Europa debido a las estrictas normas de calidad y seguridad que deben pasar los vehículos. Además, los elevados aranceles encarecerían enormemente su producto en la misma proporción que se reducían sus ganancias.

A China le ha compensado más vender coches a mercados emergentes, con dinero contante y sonante y pocos controles, para lograr producir más de un millón de vehículos anualmente desde hace al menos un lustro. Brasil, Irán, Rusia, Chile, Argelia, Arabia Saudí y Sudáfrica son los destinos de la mayor parte de las exportaciones de sus automóviles.

En cambio, China apenas exporta unos miles a Europa actualmente. Es el mercado que se le resiste junto con Estados Unidos. Pero en el caso del Viejo Continente la historia promete cambiar pronto. En España, los scooters chinos ya están entre los más vendidos y los coches no van a tardar en llegar. El desembarco ya ha comenzado.

Chinos 'made in Europe'

En febrero de 2012, la firma china Litex Motors inauguró la primera fábrica de coches chinos de Europa, en Bulgaria, con trabajadores europeos por primera vez montando coches del gigante asiático. Fue la forma que encontró este fabricante de salvar los aranceles: fabricar en Europa y hacerlo en un mercado, el búlgaro, que aunque es europeo da más facilidades.

Pero Linex se quedó en eso. Apenas vende en Bulgaria y alrededores bajo la marca Great Wall. Su oferta tampoco le permite altas miras, pues cuenta con modelos como el Voleex C10, que es un plagio de la anterior versión del Toyota Yaris; el Hover 5, clavado al Mazda CX7; o el Steed 5, inspirado en Volkswagen. Todos sus coches cumplen la normativa europea obligatoria Euro 5 sobre emisiones, pero el atractivo principal es, desde luego, su bajo precio. Los chinos ahorran en diseño para abaratar la producción.

Fue un primer paso. Ahora, otra compañía ha cambiado radicalmente la estrategia y quiere vender fiabilidad y quedarse en Europa. Esa era la intención del gigante chino Chevy, que en 2007 fundó Qoros Auto Co., Ltd. a partes iguales con el grupo israelí Israel Corporation. El objetivo era concebir automóviles atractivos para el mercado europeo, con todas las homologaciones y estándares de calidad y seguridad.

Qoros es una compañía china fundada en Wuhu y asentada en la ciudad de Changshu, provincia oriental de Jiangsu, a 83 kilómetros de Shanghái; aunque realmente se trata de  una compañía chino-israelí. Pero sus ingenieros jefe son europeos y sus asesores,  también. Qoros ha buscado la inspiración en Volkswagen, PSA y General Motors y la desarrolla con la ayuda de 800 ingenieros en China y 200 en Europa.

El alemán Hert Volker Hildebrand, diseñador de los Mini actuales y algunos Golf, dirige el proyecto con compatriotas como Philipp Eberl, que ha ideado el primer modelo de la marca, el Sedán 3. El chino Guo Qian es el presidente de Qoros, mientras que el vicepresidente es otro alemán, Volker Steinwascher, que ya fue vicepresidente de Volkswagen América.

No más plagios

Como Litex, su predecesora, la recién llegada marca china ha elegido un país del Este para asentarse. En este caso, la República Checa, con una infraestructura más potente que Bulgaria y una experiencia probada en la fabricación y exportación de vehículos. La planta en construcción allí podrá crear hasta 150.000 unidades el primer año, que se sumarán a las cerca de 450.000 que se construirán anualmente en China.

Qoros no tiene prisa, pero su proyecto europeo rueda sobre seguro. Ya ha desarrollado dos modelos preparados para pisar las carreteras este año y que ya no se asemejan a los clásicos plagios chinos. Son el Qoros 3 Sedán, que llega con el certificado de que los planes de Qoros Ltd. van en serio pues ha logrado de largo las 5 estrellas EuroNCAP; y también el Qoros 3 Hatch, presentado este marzo en el Salón de Ginebra.

Ambos coches comparten una plataforma modular muy flexible que será la base de todos los nuevos modelos inmediatos de la marca. Después pretende abarcar todos los segmentos, incluso monovolúmenes y todoterrenos. También comparten que solo estarán disponibles con motores de gasolina.

El Qoros 3 Hatch y la firma china se presentaron en el Salón de Ginebra, luciendo varios concept cars y el ya exitoso Sedán 3, el coche mejor valorado en las pruebas EuroNcap de 2013. El próximo modelo será una berlina. Qoros tiene intención de lanzar al mercado a partir de ahora uno o dos modelos anualmente.El Qoros 3 Sedán se puso a la venta en China con la llegada de 2014 y el Qoros 3 Hatch se lanza ahora. Qoros quiere dosificar sus dos modelos por los mercados europeos a finales de año y asentar su distribución en el Continente a lo largo del año 2015.

Por su parte, Chevrolet nada tiene que ver con Qoros, pero ha anunciado que dejará Europa a finales de 2015 y los concesionarios de esta firma estadounidense se han apresurado a ofrecerse como plataforma en España y otros países europeos para el fabricante chino.

Todos los coches Qoros montan un sistema de entretenimiento (denominado Qoros Cloud) con una pantalla de 8 pulgadas. Eso quiere decir que dispondrán de 3G con redes de China Unicom, participada en un 5,01% por la española Telefónica. Los Qoros van equipados con estos servicios de manera gratuita, incluido el control del vehículo, navegación y redes sociales.

Scooter Mainstreet 300 de la firma china Linhai

Primero arrasaron sus 'scooters'

A las motos europeas les surgió hace décadas competencia: las japonesas, las coreanas y, más tarde, las chinas. En China se fabrican multitud de motos y scooters; incluso coreanas y japonesas, pero el mercado de producción propia se ha impuesto en los últimos años.

Ya nos venden algunos de los modelos de scooter más exitosos del mercado, donde se han asentado por sus precios low cost y sus buenas prestaciones, certificadas con homologaciones europeas, además de su garantía de dos años en casi todos los modelos:

  • KYMCO. Marca de Taiwán, donde tiene su sede, aunque cuenta con cinco fábricas en la República Popular China. La empresa se creó en 1963 para hacer piezas de Honda y construyó su primer scooter nada menos que en 1970, así que la experiencia la avala. El Xciting 400i es su modelo estrella –al margen de los de 125, de enorme aceptación en España–: un scooter de 36 cv de potencia; para algunos, el mejor cuatro cilindros del mercado. Se vende por 4.999 euros, menos que sus competidores japoneses, Yamaha X.MAX 400 (5.799 euros) y Suzuki Burgman 400 (7.199 euros).
  • SYM. Compañía china fundada en 1954, también con sede en Taiwán y fábricas en China, como Kymco. Los scooters son su producto estrella, aunque comercializa quads, motos e incluso coches. El 2013, Sym fabricó cerca de 600.000 scooters que exportó a medio mundo. La demanda local de China es también muy importante. Tiene una treintena de scooters en catálogo, de los 50 cc a los 400 cc, baratos y fiables. Symply2 125, a la venta por 1.795 euros, arrasa en ventas. Dispone de interruptor antirrobo, portaequipajes de serie y encendido eléctrico y a pedal.
  • LINHAI. Huye de la mala calidad para diferenciarse de los clásicos productos chinos baratos. Se dedica a múltiples sectores y cuenta con varias fábricas en China. La avalan más de cincuenta años de experiencia fabricando scooters. Acaparan sus ventas Eggy 125 (1.390 euros) y Drive-in 125 (1.450 euros); aunque el más exitoso, Mainstreet 300 (en la imagen superior), está ahora de oferta: costaba 2.790 euros y se ha queda en 1.990 euros, por lo que promete dar mucho que hablar. Sus motores monicilíndricos de cuatro tiempos y refrigeración líquida aseguran consumos inferiores a los cuatro litros cada 100 kilómetros.
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