En las provincias de Cádiz y Almería, la ganadería extensiva está soportando unos costes de alimentación elevados porque, a pesar de haber llovido, no ha producido la hierba necesaria, lo que conlleva una pérdida de rentabilidad, según el último Boletín semanal de información agraria de la Junta de Andalucía.

En detalle, en Almería, la situación de los pastos refleja una disponibilidad de recursos naturales inferior a la media registrada durante los últimos años, lo que está llevando a los ganaderos a una situación de elevados gastos en alimentación, con la consecuente perdida de rentabilidad.

Estas condiciones afectan sobre todo al ganado ovino y caprino que son los de mayor implantación en la provincia, principalmente en las comarcas de Los Vélez y Alto y Bajo Almanzora.

En el caso de Cádiz este año las lluvias "no han venido de forma adecuada para el buen desarrollo de la hierba". Según indica, debido a la falta de comida se sobreexplotan las praderas en mejores condiciones, lo que conlleva que se desarrollen sobre todo las especies consideradas de peor calidad para la alimentación del ganado.

En este sentido, apunta que, dada la fecha en la que nos encontramos, auque llueva en abril se prevé que este sea un mal año para la alimentación natural del ganado y los costes de alimentación van a ser altos.

En Córdoba, el crecimiento de la hierba que se había ralentizado debido a la bajada de temperaturas y a la escasez de humedad del suelo, se ha visto reactivado por las últimas precipitaciones. Sin embargo, sigue siendo necesario complementar la alimentación del ganado con alimento concentrado y de volumen, en diferente cantidad según las zonas, cargas ganaderas de las fincas, y estado productivo de los animales (gestantes, vacíos, en lactación...).

En Granada, en la Costa, destaca la ganadería de caprino en régimen semi-intensivo. Los rebaños pastan sin tener que realizar grandes desplazamientos desde sus corrales. En la Alpujarra granadina, la ganadería constituida básicamente por caprino-ovino en régimen semi-extensivo, pastorea libremente sin grandes dificultades.

En el Poniente granadino, las cabañas extensivas que permanecen en las zonas bajas, siguen centradas principalmente sobre podas de olivar, pastizales, rastrojeras, lindazos, etc, encontrándose ya la mayoría en las zonas altas y con continuos suplementos alimenticios de heno y grano en los apriscos.

En las Comarcas de Guadix, Baza y Huéscar, salvo los días de lluvia, se aprovecha el buen estado de pastos para la alimentación. Se intensifica la paridera de primavera a la que únicamente se le aplica algo de alimentación de apoyo.

En el Valle de Lecrín, el desarrollo de los pastos aminora la cantidad de pienso a aportar en la dieta. Los rebaños pastan sin tener que realizar grandes desplazamientos desde sus corrales.

En Huelva se mantienen las buenas perspectivas, al aparecer alimentación natural en el campo. Los niveles en pozos y acequias también se mantienen adecuados.

En Jaén, este invierno ha sido bueno en precipitaciones pero la producción de hierba no ha sido abundante ya que su desarrollo se ha visto perjudicado por los vientos que han soplado una vez finalizadas las precipitaciones y que han desecado el estrato de tierra donde arraiga el pasto por lo que las dehesas no han generado el alimento esperado. Esto ha provocado que se haya estado suplementando al ganado mas necesitado (animales lactantes). Sin embargo, tras las lluvias de las últimas semanas se espera un repunte del crecimiento y que el ganado complete su dieta con pasto.

Para los cerdos ibéricos de bellota el periodo de sacrificio de la campaña 2013-2014 ha finalizado el 31 de marzo, según se establece en la nueva normativa. En el caso de los cerdos ibéricos de recebo la fecha final de sacrificio será el 15 de mayo.