Los padres que tengan previsto apuntar a su hijo en una guardería de Barcelona, ya sea pública o privada, deben darse prisa.

Ahora mismo, en la mayoría de centros de la ciudad la matrícula para apuntar a bebés de 0 a 1 año está cerrada y las listas de espera cuentan, de media, con diez niños ya apuntados.

Muchos de los padres ya lo saben, y por este motivo han llenado su solicitud de ingreso con una media de siete meses de antelación. Pero esto, en muchos casos, no es garantía suficiente para conseguir la plaza deseada.

El 55% se queda fuera

Desde el sindicato Ustec-Stes, mayoritario en el ámbito educacativo, se apunta a que el 55% de las demandas formuladas por los padres no quedan cubiertas.

Tomando como referencia los nacimientos del 2005 en Barcelona (último dato disponible), equivale a aproximadamente 7.700 plazas no atendidas, suponiendo que todos los bebés solicitaran ir a la guardería.

El sindicato UGT confirmó que "faltan plazas a miles", tanto en la pública como en la privada. Desde la Associació Catalana de Llars d’Infants , vinculada a los centros privados, su presidenta, Mercè Veà, matizó que la falta de plazas "depende de la zona".

En Gracia, por ejemplo, Josep M. Costa, padre de un bebé nacido en noviembre, explicó a 20 minutos que solicitó a finales de 2006 una plaza en siete guarderías del barrio que le emplazaron al 8 de enero. Llamó ese día por la mañana y le dijeron que ya no había plazas.

Apuntados antes de nacer

Con hasta 11 meses de antelación, los padres presentan sus solicitudes para poder acceder a una plaza de guardería. Este caso se ha dado en el distrito de Sant Martí, pero no es aislado.

Esto supone una grave dificultad para los padres de bebés de 0 a 1 año que, o bien los apuntan ya antes de gestar al niño, o bien se conforman con que su solicitud hecha en los últimos meses pase por detrás del resto, presentadas en octubre de 2006.

Una vez garantizada la plaza, son muchas las guarderías que piden el pago de la matrícula incluso antes de que el bebé nazca.