El director general de la Policía, Ignacio Cosidó, ha pedido al nuevo Jefe Superior de Policía de Melilla José Ángel González Jiménez, en su toma de posesión en sustitución de Ángel Riesco que se va como jefe superior a Cantabria, que "mantenga la máxima alerta para evitar que las células terroristas se implanten aquí", tras las detenciones realizadas hace tres semanas en la ciudad de una red que enviaba yihadistas a Siria.

A preguntas de los periodistas, Cosidó ha destacado la intervención que tuvo lugar el 14 de marzo al desmantelarse la red yihadista en una operación conjunta con Marruecos, con cuatro detenidos en España —tres en Melilla y uno en Málaga— y tres en el reino alauí, entre ellos el presunto cabecilla, al español nacido en Bélgica Mustafa Amaya (Rafael Amaya antes de su conversión al Islam).

El máximo responsable del Cuerpo Nacional de Policía ha destacado que "seguimos trabajando" en la lucha antiterrorista pero ha explicado que no podía adelantar nada por el momento sobre este tipo de grupos que pudieran estar radicados en Melilla. "No se puede dar más información de la que da, pero sí les puedo decir que seguimos trabajando", ha apuntado.

Cosidó ha explicado que "el conflicto de Siria ha generado una serie de grupos que hacen el reclutamiento y el envío de combatientes o terroristas, muchas veces para incorporarse en organizaciones terroristas vinculadas a Al Qaeda, y creo que la Policía española, nuevamente en colaboración con la Policía de Marruecos, está trabajando con mucha intensidad sobre esos grupos, porque suponen una amenaza no solamente para Melilla sino para el conjunto de España y de Europa".

Asimismo ha querido "felicitar a la Brigada de Información de Melilla, que, en una estrecha colaboración con la Comisaría General de Información, ha desarrollado operaciones importantes en la lucha contra el terrorismo", recordando que "el terrorismo es una amenaza común, no sólo a Melilla, sino al conjunto de España, de Europa y al mundo occidental".

A su juicio, "las últimas operaciones ponen de manifiesto nuestra voluntad y también nuestra capacidad para hacer frente a esa amenaza, por tanto le insto al Jefe Superior a que mantenga siempre la máxima alerta para evitar la posible implantación de estas células y redes en esta ciudad y para haga frente con determinación a cualquier forma de radicalización que pueda degenerar en actitudes violentas".