Los servicios provinciales de Consumo de la Junta han comprobado que casi la mitad de etiquetas de eficiencia energética de electrodomésticos que se venden en páginas web no estaban accesibles al potencial comprador antes de su compra.

Esta es la principal conclusión de la campaña realizada por la Junta hasta el pasado mes de octubre y en la que se han examinado etiquetas de lavadoras, lavavajillas, televisiones y otros aparatos similares, según informa la Junta en un comunicado.

En el marco de estos controles, los servicios de inspección de Consumo han visitado un total de 140 establecimientos en los que levantaron 158 actas, con un resultado de 70 positivas (44,3 por ciento).

En las inspecciones se han revisado etiquetas de secadoras de tambor, aparatos de refrigeración y aire acondicionado, lavavajillas, lámparas eléctricas, lavadoras y televisiones. En concreto, se ha verificado si el etiquetado es visible, legible, está escrito en castellano y si contiene una ficha del producto.

También han sido objeto de estos controles productos puestos a la venta en promoción con el reclamo de pertenecer a determinada clase de eficiencia energética.

Los resultados de estas revisiones indican que el 11,1 por ciento de las etiquetas no se corresponden con las reguladas en la normativa, el 7,8 por ciento de los productos no disponen de etiqueta sobre los mismos, de forma que resulten perfectamente visibles y en el 7,2 por ciento de los casos se ha detectado que no está redactada en castellano. Igualmente, en un 6,25 por ciento de las actuaciones el proveedor no suministró gratuitamente ni la información de la etiqueta energética ni la ficha del artículo.

Además, en el contexto de esta campaña, se han revisado páginas web que anuncian y venden alguno de los citados electrodomésticos, detectándose en el 51,3 por ciento de los casos que la información no se mostraba en la forma exigida por la normativa vigente y en el 48,6 por ciento que la información especificada en la etiqueta y en la ficha del producto no es accesible antes de su adquisición.

RECOMENDACIONES

La Secretaría General de Consumo recuerda que la etiqueta energética está regulada por normativa europea y permite identificar de una forma sencilla y rápida el consumo de aparatos electrodomésticos, según el color y la letra indicada. En este sentido, hay siete etiquetas, siendo la más eficiente la verde y letra A, y dentro de ésta la de clase +++, y la menos la roja y letra G. Son obligatorias para frigoríficos y congeladores, lavadoras, lavavajillas, secadoras, lavadoras-secadoras, lámparas domésticas, horno eléctrico y aparatos de aire acondicionado.

La Junta advierte a las personas consumidoras de la necesidad de comprobar el etiquetado antes de comprar un producto, para conocer si cumple la normativa en vigor.

En concreto, las obligaciones en materia de etiquetado y ficha de eficiencia energética de los electrodomésticos se contienen en el Real Decreto 1390/2011, de 14 de octubre, que regula la indicación del consumo de energía y otros recursos por parte de los productos relacionados con la energía, mediante el etiquetado y una información normalizada, y otras normas de la Unión Europea.