¿Por qué crees que es tan difícil publicar cuando no tienes un nombre? Cañailla.

El éxito en general, y la posibilidad de publicar en particular, tienen mucho que ver con la suerte. Lo difícil no es sólo empezar, sino acertar con el procedimiento que se elige. Preséntate a algún premio que no sea comercial.

¿Piensas que los libros, como hoy se conocen, están en crisis? ¿Te atreverías a publicar una novela en formato digital? Pedro.

La literatura seguirá existiendo y siendo lo mismo. Como escritora, tendré la misma ambición y los mismos problemas. Sin embargo, como lectora me gustan los libros, los prefiero como objeto, si quieres, a los medios digitales que conozco hasta ahora, y que creo que son muy inferiores por su comodidad, funcionalidad... Tal y como están las cosas, prefiero los libros de hojas de papel.

¿Cómo ves la literatura española? ¿Alguien sobresale? ¿Está en una crisis final? Xacata.

Lo de la crisis final me parece muy sorprendente y excesivo. Creo que en este momento, la literatura española está en una situación intermedia. No está ni mejor ni peor que nunca, pero creo que hay escritores, algunos jóvenes, interesantes.

¿Existe algún acontecimiento o personaje que haya marcado tu vida y tu obra de manera significativa? Miguel.

Existen muchísimos acontecimientos y personajes que me han marcado. Y eso a la fuerza tiene que estar en mi obra. Los escritores somos personas normales, nos pasan las mismas cosas que a los demás.

¿Qué opina de las mafias literarias? ¿Existen? ¿Lidera usted alguna? ¿Son realmente necesarias? Harold Bloodfiel.

Yo, desde luego, no lidero ninguna mafia literaria. Cocino, eso sí, y a veces invito a mis amigos, que a veces son escritores, a cenar. Y tampoco conozco mafias que funcionen como tales. En esta, como en cualquier otra profesión, hay grupos de amigos, o de escritores con afinidades estéticas y/o ideológicas y/o biográficas, que opinan igual sobre los mismos temas, pero en ningún caso, en el mundo de la industria editorial, somos los escritores los que detentamos el poder. Esto es una idea muy romántica, pero absolutamente errónea.

Te has declarado una apasionada del Marqués de Sade. ¿A qué se debe esa pasión por la novela erótica? ¿Es debido a las carencias o a los excesos? Gemma.

Yo nunca me he declarado una apasionada de Sade. No sé de dónde sale eso, que circula por Internet. Desde luego, no me parece verosímil que lo haya dicho alguna vez.

En sus libros hay una tensión sexual bastante importante.

¿Es atractivo, si de boca en boca se transmite que Almudena Grandes es un poco salidilla en sus libros? ¿Cree que despierta este hecho una curiosidad especial? Elena.

En la vida de las personas, en la mía y desde luego seguro que en la de usted, hay un componente de tensión sexual bastante importante. Sin embargo, otros escritores españoles han cultivado en los últimos tiempos la salidez narrativa con mucha más constancia que yo y eso no les ha ayudado a vender libros.

¿Cómo es vivir con un poeta? Elena.

Para mí es fácil, porque los dos somos escritores, pero no competimos. Vivir con Luis sólo tiene ventajas. La de contar con un lector de calidad a mano, por ejemplo, y la de vivir con alguien que sabe por qué de repente parezco autista, o estoy nerviosa, o deprimida, o por qué digo que todo lo que hago es muy malo.

¿Qué libro te hubiese gustado escribir? Little.

Me hubiera encantado escribir Las nuevas confesiones, de William Boyd. O La ciudad y los perros, de Vargas Llosa. O La buena letra, de Rafael Chirbes. O Fabulosas narraciones por historias, de Antonio Orejudo. Eso, para empezar...

El lunes, charla con Nega Gizza

La rapera brasileña Nega Gizza participará el lunes en un encuentro digital con los lectores de 20minutos.es. La cantante es natural de una favela de Acarí. Ahora que ha logrado el éxito, gracias a sus rimas combativas, sigue trabajando con los jóvenes de su sitio natal. El encuentro será la tarde del lunes, desde Brasil. Nega Gizza estará acompañada por el reportero, y blogger de 20minutos.es, Hernán Zin.

Bio

Nació en Madrid, en 1960. Licenciada en Geografía e Historia, trabajó corrigiendo y preparando textos... En 1989 obtuvo el Premio de literatura erótica La Sonrisa Vertical por la novela Las edades de Lulú. Está casada con el poeta Luis García Montero.