La Agencia de Protección Civil ha informado de la existencia de riesgo notable de aludes (nivel de peligro 3) por encima de los 2.000 metros y, partir del sábado y el domingo, riesgo limitado de aludes (nivel de peligro 2) por encima de los 2.000 metros en los tres macizos de Picos de Europa.

Esta alerta está basada en la información facilitada por la Agencia Estatal de Meteorología (AEMET), con la participación de los colaboradores nivológicos, informa el Servicio de Emergencias de Castilla y León 112.

Según han explicado las mismas fuentes, desde el pasado viernes han circulado sucesivos frentes cálidos y fríos que han producido alternativamente fuertes vientos y abundantes precipitaciones de lluvia y nieve con "variaciones muy importantes" de la cota en que se han producido ya que las temperaturas sobre los 2.000 metros han oscilado en todo el periodo entre los -8º y los 8ºC aproximadamente.

En general predominan las acumulaciones de nieve reciente de unos 50 centímetros o más por encima de los 2.200 metros y cantidades menos importantes por debajo de los 1.800 metros debido a las lluvias antes mencionadas, que han afectado a esos niveles. Los espesores totales superan los 2 o 3 metros en alturas superiores a 1.900 metros.

El 112 ha precisado también que el manto nivoso está compuesto en su parte alta por nieve reciente de los distintos episodios de nevadas "y, por tanto, en distintos estadios de transformación, alternando capas de mayor o menor densidad y cohesión". Por su parte, las placas formadas en las orientaciones este y sur, debido a los fuertes vientos que acompañaron a algunas de las nevadas ocurridas, pueden mantenerse activas, "sobre todo después de las abundantes lluvias caídas".

Así, el 112 ha insistido en que este viernes debido al aumento de las temperaturas y de la insolación, persistirá el riesgo notable de aludes, principalmente en las laderas inclinadas en orientaciones sur. También las estructuras de placa, ocultas bajo la nieve caída, pueden activarse por el contenido de agua en el manto, debido a la fusión provocada por el incremento de las temperaturas.

La Agencia de Protección Civil ha recordado algunas recomendaciones que conviene seguir en caso de ser víctima de un alud de nieve, como poner al salir el ARVA (Aparato de Búsqueda de Víctimas de Aludes) en emisión aunque parezca que no haya peligro y comprobar que funcionen, así como llevar una pala y la sonda.

Consultar la predicción meteorológica y el boletín de peligro de aludes y no iniciar la salida si el índice de peligro es superior a 3 en la escala europea son otras de las recomendaciones a seguir.

En caso de desencadenarse un alud la principal recomendación es mantener la calma e intentar huir por el lateral más próximo en dirección diagonal y descendente, cerrar la boca para que no se llene de nieve y agarrarse a cualquier roca o árbol para no ser arrastrado, así como libérese de esquís, planchas o raquetas para evitar quedarse atrapado.

Si no encuentra agarradero, luchar para permanecer a flote en el alud mediante movimientos natatorios contra la oleada y al mismo tiempo protegerse la cabeza de las rocas es otra de las recomendaciones básicas.

En el caso de permanecer sepultados, el 112 explica que es "importantísimo" adoptar forma de bola y tratar de salir antes de que el alud se modere, antes que se detenga en el valle, "porque se endurecerá en pocos minutos". Para respirar aire, desplazar la nieve con los brazos y con las rodillas e intentar hacer una cámara respiratoria.