Baleares ha pasado de registrar un total de 61.350 parados de larga duración en 2012 a un total de 63.700 en 2013, lo que supone un aumento del 4 por ciento, lo que representa el menor aumento de desempleados de larga duración del conjunto de comunidades autónomas.

Así lo destaca un informe de Randstad, que ha analizado los últimos datos de la Encuesta de Población Activa del Instituto Nacional de Estadística (INE) sobre el tiempo de búsqueda de empleo de los profesionales desocupados, que además apunta que Baleares cuenta con 254.800 desempleados que llevan más de 24 meses intentando encontrar un trabajo.

Los datos detallan que además de Baleares, las regiones que registraron menor incremento de personas que llevaban más de dos años buscando empleo fueron La Rioja (5 por ciento) y Extremadura (8 por ciento).

Por su lado, Asturias (34 por ciento), Castilla-La Mancha (29 por ciento), y Cantabria (27 por ciento), fueron las comunidades donde más creció el número de desempleados de larga duración.

Cuatro comunidades acaparan el mayor número

Por cantidad acumulada de parados de larga duración, destacan sobre el resto cuatro comunidades autónomas que acaparan un mayor número. Se trata de Andalucía (3.464.900), Cataluña (1.981.400), la Comunidad Valenciana (1.701.100) y la Comunidad de Madrid (1.555.200).

Estas cifras contrastan con las regiones como La Rioja (62.100), Navarra (112.400), y Cantabria (125.700), que presentaron los datos más bajos.

En lo que se refiere al total acumulado de desempleados de larga duración durante los cuatro trimestres, la cifra pasó de 12.111.500 en 2012 a 14.032.400. De éstos, 5.351.500 correspondían a los que llevaban buscando trabajo entre uno y dos años, mientras que los que habían empleado más de dos años en encontrar trabajo alcanzaban los 8.680.900.

Estas cantidades son superiores a las de 2012, concretamente en un 3 por ciento (para los que llevaban buscando empleo entre uno y dos años), y un 25 por ciento (para los que lo hacían desde hacía más de dos años).