El sindicato UGT Extremadura ha vinculado el retroceso de la inflación en la región en el primer mes del año a la "persistencia de la debilidad del consumo".

En nota de prensa, ha indicado que, junto con la subida de precios en los alimentos y la electricidad, la permanencia de una inflación interanual negativa es un "pésimo indicador" de la evolución económica de la región.

De este modo, ha considerado que la política económica en Extremadura "parece cumplir formalmente" con el déficit pero, en su opinión, está "ahogando la actividad". Ante este hecho, el sindicato plantea una "ganancia de poder adquisitivo" de los salarios para influir en la recuperación económica.

Cabe indicar que el IPC registró una bajada del -1,4% en el primer mes del año en Extremadura, ligeramente superior a la del año pasado en este mismo mes (-1,3%) y al descenso registrado en el conjunto nacional (-1,3%). La variación interanual del IPC en enero es "significativamente negativa" en la región (-0,1%)

Al igual que en años precedentes, el grupo de productos que más ha influido en la reducción del IPC ha sido Vestido y calzado, que ha registrado una caída del 15,5%, consecuencia, según UGT, de unas rebajas de invierno "muy pronunciadas", un "claro indicador de la debilidad de la demanda".

Le acompaña en el descenso el grupo de Ocio y cultura, con una reducción de 1,8 puntos generado por la rebaja estacional de los precios del viaje organizado; además de las Comunicaciones que bajan un -1,5% debido al decremento también más fuerte en los precios de los servicios telefónicos que en enero del año pasado.

Por el contrario cabe destacar la tendencia creciente de los precios de los alimentos (0,3%) y la vivienda (0,6%), por el incremento de los precios de la electricidad.

En la nota, UGT Extremadura ha indicado que enero es un mes "tradicionalmente negativo", en el que "se hace efectiva" la "congelación" de las pensiones y del salario mínimo, a la vez que se producen las subidas tradicionales de bienes de primera necesidad, lo que deriva en que el poder de compra de miles de familias extremeñas esté "de capa caída".

Así, el sindicato ha considerado que la "depresión" en los precios en la región revela un "estancamiento" de la economía provocado por la "caída continuada del consumo y la inversión, el deterioro del mercado de trabajo o la disminución de las remuneraciones de los asalariados".

"Los datos del IPC revelan la necesidad de potenciar las rentas y prestaciones de los ciudadanos para reactivar el consumo, la demanda interna y lograr que la reactivación económica y la creación de empleo empiece a ser una realidad", ha considerado UGT Extremadura.