El Partido Castellano (PCAS) presentará esta semana ante la Comisión Europea una denuncia por el "expolio colonial" del agua de Las Merindades y el Valle de Mena (Burgos) por parte del País Vasco.

En concreto, presentará una denuncia por el "incumplimiento" de la Directiva de Aguas 2000/60 en la que reclamará "que finalice el expolio del agua que padecen desde hace 85 años los municipios burgaleses de Merindad de Montija y Valle de Mena, con el objetivo de abastecer de agua potable a Bilbao y otros municipios vizcaínos", según han informado a Europa Press fuentes de la organización política.

Los castellanistas recuerdan que en 1928, a petición de Bilbao, el Ministerio de Fomento de Primo de Rivera otorgó una concesión de agua a perpetuidad al Ayuntamiento de Bilbao de los ríos Cadagua y Cerneja, para lo que se construyó el embalse de Ordunte en el Valle de Mena, que comenzó a operar en 1934.

En 1961, comenzó a funcionar el trasvase Cerneja-Ordunte, que trasfiere 160 litros por segundo desde la Merindad de Montija al río Ordunte, mediante una conducción de cinco kilómetros. Un conjunto de instalaciones que permite un flujo total de 615 litros por segundo para abastecer a más de 200.000 habitantes de Bilbao.

Desde el PCAS, consideran "obsoleto, anacrónico y neocolonial" el mantenimiento de estas infraestructuras hidráulicas y se han mostrado contrarios a la "titularidad, discrecionalidad y gestión" de estas dotaciones por parte del Ayuntamiento de Bilbao, por lo que han exigido una revisión de los hechos.

Los castellanistas ya mostraron su oposición a esta situación en 2010, cuando realizaron diversas peticiones a la Junta de Castilla y León para que "tomara cartas en el asunto", y en 2011 realizaron diversas iniciativas ante el Parlamento Vasco para buscar una modificación de la "desfavorable" situación.