Los comerciantes han vuelto a poner el grito en el cielo contra el proyecto del Valladolid Arena, que además de un gran pabellón, con 12.000 butacas, prevé reservar 35.000 m2 de tiendas, restaurantes y oficinas.Las dos asociaciones de comerciantes de la ciudad, Avadeco y Fecosva, mostraron ayer su discrepancia con el proyecto, porque creen que Valladolid ya está saturada de grandes superficies.
La empresa finlandesa impulsora del proyecto, JHC, ha presentado un plan de viabilidad que plantea unos beneficios desde el primer año. Para ello confía en que el pabellón pueda albergar 100 espectáculos (deportivos, conciertos...) que congreguen a 700.000 espectadores al año.
El Ayuntamiento lo ve con buenos ojos y no tanto la Diputación de Valladolid, que pone pegas al plan de viabilidad presentado.
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