La Sala de lo Social del Tribunal Superior de Justicia de Cantabria ha acordado prorrogar, a petición de los sindicatos CGT y UGT, la medida cautelar de suspensión del traslado de los 152 trabajadores de la empresa Konecta a su sede de Valladolid.

El tribunal adopta esta decisión "por razones de urgencia, sin previa audiencia y ante los perjuicios que pudiera ocasionar a los trabajadores la efectividad inmediata de la decisión de instancia", esto es, la sentencia dictada por el Juzgado de lo Social número Cinco de Santander que recientemente avaló el traslado de la plantilla de Torrelavega a la sede pucelana y se iba a producir mañana día 6 de diciembre.

No obstante, la adopción de esta medida cautelar no prejuzga "en modo alguno" la decisión que finalmente adopte la Sala en el recurso de suplicación que los sindicatos han presentado contra la citada sentencia.

Señala el auto que "se dan las circunstancias que legalmente autorizan la suspensión cautelar de la medida empresarial", al tiempo que justifica la medida "para asegurar la efectividad de la tutela judicial que pudiera acordarse en la resolución de los recursos de suplicación planteados".

Se adopta, por tanto, "por razones de urgencia sin previa audiencia y ante los perjuicios que pudiera ocasionar a los trabajadores la efectividad inmediata de la decisión de instancia (con efectos previstos al día 6 de diciembre de 2013), a la espera de la que resulte en la decisión definitiva de la Sala".

Contra esta medida cautelar cabe recurso de reposición ante la Sala en los próximos cinco días.

Valoración de ugt y cgt

Los sindicatos UGT y CGT han manifestado su satisfacción por la decisión del TSJC, que esperan sea definitiva.

Así, UGT confía en que, a diferencia del fallo judicial del Juzgado de lo Social, la sentencia del TSJC sobre el recurso de suplicación de los sindicatos sea "definitivamente favorable al mantenimiento de los puestos de trabajo en Cantabria".

Según precisa la abogada de UGT, Marta Cimas, que junto con su homóloga de CGT solicitó esta medida cautelar, el plazo dado por la empresa a los trabajadores para que decidieran entre el traslado o el despido, que expiraba hoy, queda suspendido por el momento tras la decisión del TSJC y hasta que este tribunal resuelva el recurso de suplicación de los sindicatos.

Esta medida cautelar también fue adoptada por el propio Juzgado de lo Social el pasado mes de septiembre hasta que dictó sentencia favorable a la propuesta de la empresa.

Por su parte la Confederación General del Trabajo se congratula de esta decisión judicial, que "abre una vía de esperanza", dice, para todos los trabajadores de Konecta BPO en Torrelavega, que a partir de mañana perderían su empleo de no haberse producido la suspensión, al cerrar esta empresa su centro de trabajo en Cantabria.

Y es que para CGT, esta modificación geográfica iba terminar, inevitablemente, dejando en la calle a 150 trabajadores. Recuerda en este sentido que siempre ha advertido de la "perversidad" de esta decisión empresarial.

"Se puede atender telefónicamente de igual manera a los clientes de Vodafone desde Torrelavega que desde Valladolid, y esta decisión era un claro ERE encubierto, y barato, que dejaba en absoluta indefensión a los trabadores de Torrelavega de la empresa Konecta, que habían estado trabajando durante años en Golden Line", asegura.