El alcalde de Sevilla, Juan Ignacio Zoido, ha asistido este miércoles a los actos con motivo del Día de la Constitución en el Colegio María Auxiliadora de Sevilla, donde ha puesto de manifiesto la necesidad de tomar "ejemplo" del "espíritu de diálogo" de la Constitución española, que cumple 35 años, en vez de "empeñarnos en introducir cambios que no están justificados".

En su intervención, ha subrayado su apoyo al modelo reflejado en ésta, con una validez "incuestionable", y señala que la tendencia general actual es la "universalización y la unión en busca de los intereses comunes", por lo que considera que "no es momento de ir contracorriente y defender escisiones o deseos de independencia que no reportan beneficios para ninguna de las partes".

"Sin duda que la Constitución, al igual que cualquier ley, norma o marco, no puede considerarse inamovible y debe y puede estar sujeta a revisiones o actualizaciones, pero tampoco podemos caer en el revisionismo por el revisionismo, ni en querer cambiar las cosas tan sólo porque lleven vigentes 35 años o los años que alguien considere suficientes", agrega.

Así, asegura que "únicamente" hay que modificar aquello que necesite ser modificado y reitera la "salud" de la Constitución, que fue en 1978 "fruto del diálogo, el entendimiento, e incluso la renuncia bien entendida, por parte de todos los partidos políticos en beneficio de un bien superior, el interés general de la sociedad española para construir un estado social y democrático de derecho".

"Es el ejemplo más representativo de que es posible y beneficioso dejar a un lado muchos criterios partidistas en beneficio del desarrollo de la sociedad. No en vano, aquel diálogo abierto y sin reservas que se produjo en 1978 entre defensores de criterios opuestos ha conseguido consagrarse a lo largo de todos estos años", recalca.

Zoido insiste en la igencia "plena" de la norma y echa en falta "en estos días convulsos ese espíritu de acercamiento". "En estos tiempos tan complicados por la dura situación socioeconómico y financiera que estamos atravesando, no contemplo mejor receta para superar esos negros nubarrones, que ya parecen ir alejándose poco a poco, que heredar ese clima de diálogo del 78", insiste.

Según afirma, "ahora que vuelven a escucharse algunas voces, cíclicas y recurrentes, que plantean una revisión de nuestra Carta Magna o aluden a hipotéticas terceras vías, defiendo sin ninguna reserva, y no por contraposición ni por recelo alguno ante la evolución, sino por convencimiento absoluto, la vigencia plena del modelo constitucional, el que todos los españoles nos otorgamos de una forma ejemplar hace ya 35 años".