Agentes de la Guardia Civil han intervenido un total de 3.700 puros caliqueños en dos puntos de venta de la ciudad de Valencia, según ha informado el Instituto Armado en un comunicado.

La Guardia Civil tiene establecidos unos dispositivos de servicio encaminados a evitar la comercialización de todo tipo de productos que puedan incumplir la normativa sobre contrabando en la provincia de Valencia.

En el marco del operativo realizado el pasado lunes, se procedió a la inspección de dos puntos de venta de estos productos. En una primera inspección, en un almacén ubicado en la ciudad de Valencia, los agentes encargados, se incautaron de 2.800 puros caliqueños, de diversas variedades, todos ellos sin fiscalizar, así como de 60 cajetillas de tabaco sin la correspondiente precinta fiscal española.

Por ello, fue denunciando a un hombre de 52 años y de nacionalidad española, por una infracción a la ley de represión del contrabando. Esta persona es reincidente debido a la comisión de hechos similares.

En una segunda inspección y fruto de las gestiones realizadas por los miembros de la Guardia Civil, se interviniendo 900 puros caliqueños ilegales, preparados para su venta, en un establecimiento público también ubicado en Valencia Por este hecho se realizo denuncia por infracción a la ley de represión del contrabando a una mujer de 22 años de edad y de nacionalidad española, propietaria del establecimiento.