El tercer 'Black Friday' que se celebra en Logroño cuenta con un total de 331 comercios adheridos, 33 más que el año pasado y un 35,6% más que en la primera edición de la iniciativa, cuando hubo 244. Los establecimientos permanecerán abiertos de forma ininterrumpida hasta las 22 horas, con descuentos de al menos un 20% en sus productos habituales.

La alcaldesa de Logroño, Cuca Gamarra, y el presidente de la Cámara de Comercio, José María Ruiz-Alejos, han sido los encargados de dar el pistoletazo de salida a esta actividad. En este sentido, Gamarra, ha destacado que se trata de la edición con mayor participación.

"Esta iniciativa se trata de una acción comercial pionera que generó el año pasado un aumento en las ventas de hasta un 400% y ha servido de ejemplo para otras ciudades. Por ello, un año más, el 'Black Friday' busca animar el consumo y apoyar al sector comercial, como elemento dinamizador de la economía local y generador de empleo que es", ha subrayado la alcaldesa de Logroño.

Logroño se convirtió en 2011 en la primera ciudad de España en celebrar 'Black Friday', que es todo un fenómeno comercial de masas en los Estados Unidos y que en la capital riojana se vivió "con un rotundo éxito de participación".

Así, un 70% de los comercios que participan en la presente edición ya lo hicieron el pasado año. De los 331 participantes, un 30% son comercios nuevos. Los sectores comerciales más representados serán moda y complementos, hogar y decoración, calzado, lencería, mercería y moda infantil, entre otros.

Elemento dinamizador.

'Black Friday' también va a convertirse en un elemento dinamizador del turismo y de promoción de la capital riojana, ya que la campaña se ha difundido en las ciudades limítrofes con el fin de atraer visitantes y compradores de las mismas. Los comercios adheridos a esta iniciativa estarán convenientemente identificados en sus escaparates. El descuento se limita a 'Black Friday' en horario ininterrumpido de 10 a 22 horas.

Además, desde la organización de la campaña, se ha animado a los establecimientos participantes a que aprovechen esta iniciativa para que ellos mismos organicen actividades especiales en sus comercios para atraer a potenciales clientes.

Como ha destacado Ruiz-Alejos, "los comercios ofrecerán, como mínimo, en este día un 20% de descuento en todos los productos que tengan en su establecimiento, excepto librerías, cuyo máximo descuento legalmente permitido está en el 5-10%".

"De este modo -ha dicho-, el beneficio es tanto para los negocios como para los clientes". Ha recordado que, según el balance ofrecido el pasado año, hubo comercios que llegaron a alcanzar incrementos de ventas de hasta el 400%. Además, un 50,3% de los consultados afirmó que sus ventas se habían incrementado más de un 50% respecto a la facturación de un día normal.

En este sentido, el presidente de la Cámara ha apuntado a "un ligero cambio de tendencia" en la marcha del comercio, a lo que ha sumado que "tenemos la percepción de que no es algo coyuntural, va a ser una mejoría que va a ir al alza, por lo que vamos a aprovechar para animar la tendencia con acciones como ésta y más que van a venir".

La denominación del evento deriva de una tradición americana por la que las tiendas ofrecen descuentos a sus clientes, lo que genera importantes flujos de compradores a sus comercios, e incluso llegan a colapsar las ciudades, siendo un día 'negro' para los servicios de movilidad de las ciudades.

Otra teoría de la denominación 'viernes negro' alude a que las cuentas de los establecimientos adheridos a la iniciativa pasan de rojas a negras porque incrementan sus ingresos.