La Obra Social de la Caixa aportará un total de 170.000 euros -85.000 euros por año- para la ampliación por dos años más del proyecto de Intervención Comunitaria Intercultural que, desde el año 2010, se viene desarrollando en los barrios logroñeses de San José y Madre de Dios.

La alcaldesa de Logroño, Concepción Gamarra, y el director del Área Social de la Obra Social "la Caixa", Marc Simón, han firmado en el Ayuntamiento de Logroño el convenio de colaboración para impulsar la continuidad de esta iniciativa, una vez que ha concluido su primera fase, de tres años.

El fomento de la convivencia y la cohesión social en zonas con una diversidad cultural significativa es uno de los grandes retos a los que la Obra Social "la Caixa" quiere dar respuesta.

Prueba de ello, como ha afirmado Simón, "es su continuidad tras tres años de trabajo en la gestión positiva de la convivencia intercultural y en el impulso de un conjunto de acciones locales a favor de la cohesión social en el barrio de San José y Madre de Dios.

De este modo, la Obra Social de la Caixa "refuerza con el Ayuntamiento de Logorño su compromiso en continuar desarrollando sus líneas de actuación del Proyecto de Intervención Comunitaria Intercultural".

La iniciativa la seguirán llevando a cabo los protagonistas del territorio: administración, recursos técnicos y ciudadanía, aunque, como ha señalado Marc Simón, "se van a reducir el número de personas que ahora se dedican a impulsar las nuevas maneras de relación en los barrios, puesto que son formas ya interiorizadas".

El Proyecto de Intervención Comunitaria Intercultural seguirá trabajando "en base a su razón de ser, la promoción de la convivencia y la cohesión social desde una perspectiva positiva y enriquecedora". Las actuaciones seguirán desarrollándose sobre todo en los ámbitos de Salud y Educación, mediante la creación de oportunidades y de espacios de participación abiertos a toda la comunidad del territorio.

El Proyecto de Intervención Comunitaria Intercultural, es impulsado por la Obra Social "la Caixa" desde 2010 en 17 barrios y municipios de España en colaboración con distintas entidades sociales.

La iniciativa consiste en una intervención preventiva y promocional que fomenta las relaciones interculturales, favoreciendo la cohesión social y, en definitiva, pretende el empoderamiento de la sociedad en pos de la convivencia y el desarrollo comunitario.

"garantizar la cohesion social"

Por su parte, la alcaldesa ha afirmado que "el Ayuntamiento valora positivamente los resultados de las acciones generales y específicas llevadas a cabo hasta ahora y, por este motivo, el Proyecto de Intervención Comunitaria Intercultural seguirá trabajando en la promoción de la convivencia desde una perspectiva positiva y enriquecedora".

Ha recordado que, entre Madre de Dios y San José, hay empadronados unos 23.000 habitantes, de los que un 23,84% son de procedencia extranjera, por lo que ha abogado por acciones que impliquen "garantizar la cohesión social en la ciudad, y, para ello, es necesario cultivar los valores de la buena convivencia".

Una muestra significativa de estos tres años de trabajo activo, en los que se han mimado relaciones, abierto espacios de encuentro y facilitado la información bidireccional, es el desarrollo de "Somos barrio", la Monografía Comunitaria, con su diagnóstico posterior.

En él, se recogen aportaciones totalmente plurales en torno al momento actual que están viviendo los barrios de San José y Madre de Dios, y en el que han participado y colaborado un amplio número de personas, responsables públicos, entidades y recursos técnicos. Para la monografía se organizaron 84 coloquios, que implicaron a un total 153 personas. En el proceso de diagnóstico 85 personas, aportaron sus ideas y prioridades.

Finalmente, con todo ello se ha generado una hoja de ruta de la programación comunitaria intercultural que requirió la dedicación de casi 150 personas. Para canalizar los esfuerzos técnicos y ciudadanos hacia el trabajo comunitario se han creado sendos espacios.

El Espacio Técnico de Relación (ETR) reúne periódicamente a los recursos técnicos del territorio (salud, servicios sociales, vivienda, seguridad, educación, discapacidad...), dispone de varias comisiones de trabajo en marcha, y en febrero cumplirá ya dos años de experiencia.

Por su parte, el Espacio Ciudadano Comunitario (ECC) se formó en enero de 2013 y ha tenido un papel activo en la aportación de ideas que guíen el trabajo de los técnicos.

Es por ello que en este momento, el trabajo de la segunda etapa, está centrado en el impulso y desarrollo de las acciones priorizadas en la programación comunitaria, con el objetivo de fondo de mejorar las condiciones de organización y desarrollo local, generando continuamente espacios colaborativos donde se encuentren, participen y sumen fuerzas, de un modo organizado, las distintas administraciones, los recursos técnicos y la ciudadanía, tanto organizada, como la que participa a título individual.