El procurador socialista José Ignacio Martín Benito ha acusado a la Junta de Castilla y León con el consejero de Fomento y Medio Ambiente, Antonio Silván, a la cabeza de estar negando la mayor en el asunto de los vertidos incontrolados en el Lago de Sanabria, en Zamora, y, tras comparar esta actitud con la negación de San Pedro a Jesucristo, ha advertido de que, como entonces, el gallo cantó y seguirá cantando.

"Ojalá los controlen e impidan de una vez por todas los vertidos y den solución a los sistemas por el bien del desarrollo sostenible", ha deseado Martín Benito para quien los vertidos incontrolados al Lago de Sanabria son "la punta del iceberg" de lo que está ocurriendo en otros espacios naturales de Castilla y León con vertidos incontrolados y sin depurar en Sierra de Francia, Batuecas o Arribes, entre otras zonas.

El procurador socialista ha acusado a la Junta de haber mantenido esta situación durante ocho años sin hacer nada y ha advertido de que si no se pone una solución pedirán la dimisión de Silván.

Por su parte, el consejero de Fomento ha ratificado todas y cada una de las afirmaciones que realizó en su comparecencia de "urgencia y a petición propia" de ayer en las Cortes donde aseveró que el Lago de Sanabria nunca ha estado contaminado, que en los vertidos depurados no hay ningún riesgo de contaminación, que son los ayuntamientos los que depuran con autorización de la CHD y que la Junta colabora para que los vertidos más importantes salgan del lago.

En este sentido, ha pedido a los socialistas que se unan a la Junta en su intento por lavar la imagen del Lago de Sanabria que unos "irresponsables" han querido dañar de forma "injustificada" desde el convencimiento, además, de que este espacio natural goza "de la mejor salud".