Alrededor de 200 personas se concentraron ayer a las puertas del Ayuntamiento de Valencia para pedir la liberación de María José Carrascosa, encarcelada en EEUU por no devolver a su hija al padre pese a que la Justicia españoñola le había concedido la custodia a ella.

La concentración, a la que también asistió la alcaldesa de Valencia, Rita Barberá, miembros del pleno municipal y del Parlamento valenciano, sirvió para que los abogados de esta mujer expresaran su confianza en que el sistema judicial norteamericano advierta lo que a su juicio es un "fraude procesal".

María José Carrascosa ingresó en la prisión tras ser detenida el pasado 21 de noviembre acusada de secuestrar a su hija y por desacato a la autoridad, tras haber permanecido tres meses escondida de la Justicia norteamericana.

Según la familia de Carrascosa, la mujer se encuentra mal porque no le dan la medicación que necesita para compensar la ausencia del tiroides, que le fue extirpado hace algún tiempo.

Una acción tramada por su ex marido

"Confiamos en que el sistema americano se dé cuenta de que todo se trata de una acción promovida por su ex marido, que está haciendo un uso abusivo de la Administración de Justicia y promoviendo un fraude procesal, pues ya perdió este mismo caso en España", señaló el abogado de la familia, Aurelio Marín.

"Una persona no puede obviar el sistema de Justicia español y plantear el mismo caso en Estados Unidos, pues ya ha sido juzgado. Creemos que pronto se darán cuenta, se revocará la sentencia anterior y se dejarán sin efecto medidas acordadas en contra de María José", añadió el abogado.

María José Carrascosa ha sido internada en las últimas horas en una celda incomunicada, según informó Marín, "bajo la excusa de prestarle una asistencia sanitaria especial" que, de momento, "no ha recibido".