Reconducir el "distanciamiento" actual con los agentes sociales, retomar un "diálogo fluido y constructivo" para afrontar el futuro "favorable" hacia el que camina Cantabria, y hacer valer de cara al interior y al exterior la realidad de una región con un clima social positivo.

Esa es la voluntad que el presidente del Gobierno de Cantabria, Ignacio Diego, ha trasladado este viernes a la secretaria general de UGT en Cantabria, María Jesús Cedrún, y a su homólogo de CCOO, Carlos Sánchez, con los que se ha reunido por separado.

Diego ha explicado que ese distanciamiento con los sindicatos, en el que ambas partes han tenido en su opinión responsabilidad, se debe al "papel" que en estos dos últimos años han tenido que asumir tanto el Gobierno como las fuerzas sociales.

En este sentido, ha afirmado que el Ejecutivo se ha visto obligado a asumir, "desde la autoexigencia y la exigencia a los demás", un papel de "responsabilidad" y de toma de decisiones "absolutamente imprescindibles" para "asegurar la viabilidad" de la Administración y de la economía regional ante los "despilfarros" y "exageraciones" de los anteriores dirigentes regionales.

Sin embargo, el presidente ha asegurado que no tiene "ninguna preconcepción" hacia los sindicatos y que, además, entiende su rol en esta coyuntura e incluso el hecho de que hayan reaccionado con un "exceso" ante las medidas adoptadas. A su juicio, las diferencias surgidas no proceden "ni de conceptos ni de puntos de vista" sobre determinados temas, y se ha mostrado convencido de que "somos capaces de coincidir en más cosas de las que disentimos".

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Borrón y cuenta nueva'

Por todo ello, Diego quiere hacer 'borrón y cuenta nueva', y poner las miras en un futuro "halagüeño" a corto y medio plazo hacia el que Cantabria "avanza" inmersa en una coyuntura económica distinta, que es fruto, precisamente, ha asegurado, de la planificación y el trabajo realizado por el Gobierno regional en estos dos últimos años.

Según ha dicho, "merece la pena" en estos momentos retomar el diálogo en beneficio del interés general de la Comunidad Autónoma, algo que pretende hacer -ha añadido- siguiendo el procedimiento establecido a comienzos de legislatura, es decir, discutiendo los asuntos importantes en las diferentes mesas sectoriales.

Además, se ha mostrado partidario de mantener, al margen de estas mesas sectoriales, reuniones periódicas con los secretarios generales de los sindicatos, bien a petición de éstos o del propio Gobierno, para tratar asuntos trascendentes para Cantabria.

Concertación social

En relación con la concertación social, el presidente cántabro ha señalado que, si ese diálogo desemboca además en la firma de un acuerdo de este tipo, "excelente" porque, aunque no se trata de una "herramienta imprescindible", sí sería un "valor añadido".

En el transcurso del encuentro mantenido a primera hora de este viernes en la sede del Ejecutivo, Diego ha intercambiado con Cedrún impresiones y documentos sobre perspectivas económicas y sociales de la región, perspectivas en torno a las que ambas partes coinciden o difieren como consecuencia, según el presidente, de la "diferencia de visión política".

Pese a ello, el jefe del Ejecutivo regional ha transmitido al sindicato UGT y al conjunto de los agentes sociales su confianza en la recuperación de Cantabria de la mano de las medidas que ha puesto en marcha su Gobierno y de otros proyectos empresariales que están tomando cuerpo en estos momentos, sobre los que prefiere mantener la discreción hasta que se materialicen.

La secretaria general de UGT, que se ha mostrado "sorprendida y contenta" por la llamada del presidente, ha destacado que la intención de UGT es "retomar el diálogo" pero para "ir más allá de las medidas habituales, para salir de la rutina" y estudiar medidas que permitan "avanzar y romper" la dinámica actual.

Según ha explicado, UGT "no es tan optimista" sobre la evolución económica de Cantabria como el presidente, que está "convencido" de que 2014 va a ser un año "mejor" y asegura que los empresarios "se sienten con menos incertidumbre" de cara al próximo año. Sin embargo, para UGT la "principal preocupación" de trabajadores y empresas "sigue siendo la carga de trabajo".

Cedrún ha manifestado al presidente su desacuerdo con la reforma fiscal, le ha reprochado que no haya presentado a los sindicatos el presupuesto de 2014 antes de su remisión al Parlamento, y también ha mostrado su "extrañeza" por el formato de la reunión, al convocar a los líderes sindicales por separado. No obstante, ha dado la bienvenida a la voluntad de diálogo manifestada por el presidente. "No lo ha llamado concertación", ha puntualizado en declaraciones a los medios de comunicación.

Reunión "infructuosa"

Por su parte, el secretario general de CCOO de Cantabria, Carlos Sánchez, ha señalado que la reunión con Diego ha sido "cordial" y basada en el "respeto institucional", pero ha lamentado que "haya sido infructuosa ya que no se ha llegado a ningún acuerdo y que no sirva para restablecer el diálogo social".

"Desgraciadamente, he salido igual que he entrado" sin poder participar en los presupuestos porque ya están presentados en el Parlamento, ha explicado Sánchez.

El secretario de CCOO ha afirmado que esta crisis está provocando unas grandes desigualdades en la sociedad y le ha dicho a Diego que los presupuestos presentados, "en el mejor de los casos", van a provocar un estancamiento de la situación, aunque en su opinión "lo más probable es que se agudice el desempleo y la pobreza".

Sánchez ha explicado que se han intercambiado una serie de gráficos en el que cada uno explicaba la situación de la crisis desde su punto de vista. "Nosotros vemos que la actividad económica sigue cayendo, pero sobre todo, destacan las cifras del desempleo, que cada vez aumentan más y las políticas que se están ejecutando no ayudan a la recuperación. Sin embargo el Gobierno se muestra muy optimista respecto a 2014", ha coincidido con Cedrún.