Fueron precisamente estas ofertas navideñas las que llevaron a la Policía hasta los integrantes de la banda, que eran seis ecuatorianos, entre ellos, una mujer.

En la misma operación también fueron apresadas otras cinco mujeres suramericanas que eran explotadas sexualmente.

Los agentes detectaron que la organización de ecuatorianos disponía de un local en la calle Esteban Arteaga, en Carabanchel. Supuestamente se dedicaban a la reforma de viviendas, pero los clientes accedían a su interior a través de una puerta metálica que sólo se abría cuando llamaban al timbre.

Anuncios en prensa

La investigación descubrió que los presuntos delincuentes utilizaban el local como una tapadera para explotar a mujeres de distintos países hispanoamericanos.

La Policía detectó que además de procurar clientes adolescentes para sus meretrices con los anuncios  en los institutos, también captaban clientela a través de anuncios insertados en prensa de tirada local y nacional.

Los policías descubrieron que la banda disponía, además, de un piso en la calle Alejandro Sánchez, también en Carabanchel, dedicado a la misma actividad.

Podían pagar con tarjeta de crédito

Los policías comprobaron que los clientes de esta red de prostitución podían pagar tanto en metálico como con tarjeta de crédito, pues el local disponía de terminal TPV. Los agentes intervinieron varios cuadernos con la contabilidad de los servicios y 2.260 euros en metálico. Las extranjeras detenidas por estar en España en situación irregular afirmaron que la mitad de sus ganancias eran para la organización.