Las nueve personas de la Plataforma de Afectados por las Hipotecas (PAH-Asturias) imputados por amenazas a la diputada del PP Carmen Maniega, durante sendos escraches en Oviedo y Avilés (16 y 22 de marzo) han reiterado este miércoles, antes de declarar ante el juez, que ni insultaron, ni acosaron, ni amenazaron a la parlamentaria popular.

Arropados por un buen número de personas, han acudido a los Juzgados de Llamaquique de Oviedo. En su nombre ha declarado Miguel García, que ha explicado que en ambas situaciones las personas que realizaron el escrache cantaron consiganas como 'si se puede' o 'no son suicidios, son asesinatos', pero en ningún momento insultos o amenazas, y que tampoco se acercaron más de tres o cuatro metros a ella. "La mayoría de lo que (Maniega) ha dicho es mentira", ha señalado García, negando entre otras cosas, la afirmación de la diputada 'popular' de que iba a compañada por una menor.

En su opinión, el proceso judicial se inscribe en una estrategia de "criminalización" a su movimiento que ha conseguido parar cientos de desahucios en toda España (cinco en Asturias en el primer semestre de 2013, además de 28 daciones en pago). García ha recordado que los escraches, tanto a Maniega como a otros representantes del PP se hicieron porque la plataforma invitó a los diputados del PP a acudir a sus asambleas para conocieran de primera mano la situación de los afectados por los desahucios, y así no votaran en contra de la Iniciativa Legislativa Popular que presentaron a las Cortes, con más de un millón y medio de firmas, para demandar la paralización de los desahucios y la dación en pago.

"Como solo vino un diputado, decidimos ir nosotros a ellos", ha explicado.

La ventanilla no sirve

García ha aprovechado para denunciar públicamente la situación de las hipotecas, que en Asturias, en el primer semestre de 2013 han subido un 28%". Ha negado que la ventanilla creada por el Gobierno autonómico para la renegociación de hipotecas a fin de evitar desahucios tenga ninguna utilidad. "Es una negociación con entidades financieras en unas condiciones todavía peores", critica.

También niega que tenga utilidad la nueva ley hipotecaria del Estado, "que es igual que la anterior pero esta vez está apoyada por las entidades financieras".