El conseller de Interior de la Generalitat, Ramon Espadaler, ha afirmado este lunes por la noche que "el principal problema" del incendio forestal declarado en Vilopriu, en la comarca gerundense del Baix Empordà, es la velocidad del viento de tramontana, que alcanza 60-70 kilómetros por hora, y eso dificulta mucho controlarlo.

En declaraciones desde el centro de mando de la Conselleria de Interior en la zona del incendio, ha dicho que la situación no está bajo control por culpa de esta fuerza del viento, y "nada hace pensar que se pueda calmar; ligeramente, quizá".

Ha añadido que hay 23 personas desalojadas y reubicadas; que no consta ningún herido, y que se ha confinado a los vecinos de cuatro municipios "para garantizar la seguridad": Vilopriu, Colomers, Foixà y Jafra.

Así, "la situación no está bajo control" y los efectivos trabajarán toda la noche: sobre las 22.30 horas aproximadamente, 60 dotaciones de Bomberos de la Generalitat, 80 efectivos de Mossos d'Esquadra, y también agentes rurales y el Sistema d'Emergències Mèdiques (Sem).

Sobre todo superficie agrícola

El perímetro del fuego es de 300 hectáreas, y la mayor parte es agrícola —"mucho más" que forestal—, ha explicado Ramon Espadaler.

Al preguntársele por la causa del incendio, ha respondido: "No estoy en condiciones de confirmar" ningún posible origen del fuego.

"Todo indica que hay un único punto de origen" de las llamas, ha añadido el conseller de Interior, pero ha dejado claro que aún debe estudiarse.