La Audiencia de Girona ha condenado a 17 años y nueve meses de cárcel al parricida Carlos S. que mató a su padre utilizando una navaja y ocultó el cadáver en un armario en su piso de Lloret de Mar (Girona) tras su negativa a darle dinero, lo que motivó una discusión.

Según la sentencia, Carlos S. clavó 13 puñaladas de forma intencionada en el cuello y la parte anterior del tórax de su padre, una de ellas en la arteria aorta que le produjo la muerte, aprovechando el hecho de ser 25 años más joven que la víctima y con una mayor envergadura física.

El parricida le propinó diversas puñaladas y se apoderó de dinero, un vehículo BMW y una tarjeta de crédito —de la que conocía el número para poder operar con ella y que utilizó—, después de introducir el cadáver en un armario del piso que compartían.

La resolución de la juez, que ratifica el veredicto de culpabilidad del jurado popular, concurre en todos los delitos de Carlos S. el atenuante de hallarse bajo los efectos del alcohol y las drogas, aparte de obligarle a indemnizar al propietario del piso en el que residían con 1.298 euros por la reposición de mobiliario y la limpieza del inmueble.

La sentencia condena a Carlos S. a 12 años y seis meses de prisión por el delito de homicidio, a tres años y otros seis meses de cárcel por la falta de robo con violencia y a 21 meses de prisión por el delito continuado de estafa a su padre.