Las universidades públicas valencianas calculan que los cambios anunciados por el Ministerio de Educación en las becas Erasmus supondrán la pérdida de entre medio millón y un millón de euros y han calificado la medida y la forma de hacerla pública de "lamentable".

Los máximos responsables de las instituciones de educación superior se han manifestado en estos términos durante una rueda de prensa previa a la conferencia coloquio 'Universidades públicas valencianas: retos de futuro', organizada por la Real Sociedad Económica de Amigos del País de Valencia.

Al ser interrogados por los medios por su valoración sobre la modificación que la administración central prevé hacer en estas ayudas —y que supondrá que los seleccionados este curso escolar 2013-2014 para la 'aportación complementaria' del Estado para la beca Erasmus, de unos 150 euros al mes, tienen que haber sido a su vez adjudicatarios de una beca general el curso pasado— han expresado su "desacuerdo tanto en el fondo como en la forma".

Así, el rector de la Universitat de València (UV), Esteban Morcillo, ha reconocido la "sorpresa" de los equipos directivos de las universidades, al igual que su "preocupación", ya que "un amplio grupo de personas que están de Erasmus en diferentes lugares de la Unión Europea se van a quedar en una situación muy difícil y muy complicada de gestionar para las universidades valencianas".

"Si se hubiera hecho para el curso que viene se hubiera podido tramitar mejor las estancias de los alumnos fuera pero será muy difícil y en estos momentos no me atrevería a decir cómo podemos gestionarlo", ha confesado Morcillo, que ha augurado que "algunas personas se plantearán volver de su beca Erasmus". "Supongo que el estudiantado protestará por una medida que no hemos podido anticipar porque no sabíamos", ha lamentado el rector.

En la misma línea, el máximo responsable de la Universitat ha hecho notar que las instituciones educativas, que ya aportan una parte de estas ayudas, van a tener muy difícil poder asumir también las que deje de otorgar el Estado, teniendo en cuenta su precaria situación económica.

En este sentido, ha advertido de que en el caso de la Comunitat Valenciana se trata de una cantidad "lo suficientemente importante", teniendo en cuenta unos 100 euros al mes, a lo largo de dos semestres y multiplicado por el número de beneficiarios afectados de un colectivo de al menos 2.500 estudiantes. "Podríamos estar hablando de entre medio millón y un millón de euros", ha cifrado.

Este recorte, ha apostillado, contrasta con el objetivo de la Estrategia 2020 de lograr que aproximadamente un 20 por ciento del alumnado tenga movilidad internacional. "Medidas como ésta, por la mediad en sí misma y por no haberla podido conocer con tiempo suficiente, nos deja a los equipos de gobierno en situación muy compleja", ha insistido.

En términos similares, el rector de la Universitat Jaume I de Castellón (UJI), Vicent Climent, ha reprochado que el Ministerio "unilateralmente ha adoptado otra medida sin tratarla" con las universidades.

"Nos hemos enterado por el BOE y por los medios de comunicación; esa es la política que lleva el Ministerio y es muy lamentable no contar con las universidades porque lleva a una fractura que ya veníamos anunciando los rectores: aquél estudiante con recursos podrá cumplir con la internacionalización y el que no, no lo hará", ha manifestado. "Que el Ministerio se dedique a hacer experimentos provoca la depauperación del sistema", ha recalcado.

"cambiar las reglas del juego"

También se ha sumado a las críticas el rector de la Politècnica de València (UPV), Francisco Mora, que ha resaltado que "lo que no se puede hacer es cambiar las reglas de juego a mitad del partido". "Es muy triste, nos parece fatal que un 29 de octubre se anuncie este tema, estamos en desacuerdo en el fondo y en la forma", ha sentenciado.

"política educativa estable"

Por su parte, el rector de la Universidad de Alicante (UA), Manuel Palomar, ha reclamado "una política educativa estable que permita a los integrantes de las direcciones de las universidades y los estudiantes afrontar un periodo en la educación superior como mínimo de cuatro años", al tiempo que "una política estable y compartida".

Asimismo, ha llamado la atención sobre el hecho de que esta medida abunda en "las desigualdades territoriales" y ha puesto como ejemplo que "no es lo mismo que en Andalucía se perciba 600 euros por becas Erasmus que la Comunitat, donde es bastante menos".