El principal reto al que se enfrentan los emprendedores del presente y del futuro es la capacidad para adaptarse a un mundo en constante cambio, que vive inmerso en un proceso "aceleración extrema", en el que todo "va tan rápido, que cuando te das cuenta del cambio, ya se ha producido y llegas tarde".

Son palabras de Carlos Barrabés, considerado un 'gurú' de las nuevas tecnologías, así como uno de los españoles más influyentes, durante su intervención en la ponencia inaugural del Foro Emprende, un encuentro celebrado en Mérida en torno a la figura del emprendedor, que cuenta con más de 1.500 participantes inscritos.

Barrabés, formado en turismo en Zaragoza y en la Harvard Kennedy School en el programa "Global Leadership and Public Policy for the XXI Century", es empresario y colaborador habitual de múltiples programas con gobiernos e instituciones en todo el mundo, entre ellos el Foro de Davos.

En su intervención, ha puesto como ejemplo el fenómeno ocurrido con 'Whatsapp', que en apenas año y medio "ha destrozado un negocio enorme" como era el de los mensajes SMS para las compañías telefónica. Así, ha dicho que si no hace mucho tiempo se necesitaban periodos de entre 7 y 8 años para que una buena idea se convirtiera en "estándar", ahora ese plazo se ha reducido a apenas 3 años.

Atribuye esta capacidad a las nuevas tecnologías, que están al alcance de cualquiera, y que, según ha señalado, es la "base" de un mundo en el que cada vez más se propicia el crecimiento de las grandes ciudades, como centros de consumo y de conectividad.

Asimismo considera que son responsables de estos cambios los teléfonos inteligentes (smartphones), de los que ha dicho que son el "trasto más personal" que nunca antes ha habido, puesto que son "una extensión de ti mismo". En este sentido, ha añadido que cada vez las personas tienen "menos confianza" en lo que ven. "La confianza está en lo que eres, y lo que tú eres está en la nube", ha añadido.

Barrabés ha señalado que la "clave" para los emprendedores en el futuro se encuentra en la "complejidad". Según ha dicho, éstos no hacen cosas para un mundo "complicado", sino para un mundo "complejo", en el que "cuando entras" en una iniciativa, desconoces cómo es la salida.

Por tanto, los emprendedores serán "gestores de la complejidad", lo que les obliga a ser "terriblemente adaptativos", entendido esto como la capacidad "de crecer tan rápido como lo hace el mercado".