La Guardia Civil de San Juan de Aznalfarache (Sevilla) ha detenido a dos personas de nacionalidad rumana como presuntos autores de un total de cuatro robos con fuerza tras ser sorprendidos después de haber forzado las cerraduras de un bar en Bormujos.

En un comunicado, la Benemérita ha informado de que un vecino alertó de que dos personas se habían bajado de una furgoneta y, tras ponerse guantes, se dirigieron a un bar que estaba cerrado. Así, varias patrullas de la Guardia Civil se dirigieron al lugar indicado y comprobaron que las cerraduras del local habían sido forzadas "con mucha habilidad" y que la persiana metálica se encontraba parcialmente levantada.

Los agentes se dispusieron a realizar una búsqueda intensiva por la que hallaron una furgoneta blanca con dos personas en su interior. En el interior de la misma había objetos que "suelen usarse en robos por forzamiento", como una taladradora, brocas, una batería, destornilladores o aparatos electrónicos como inhibidores de frecuencia, por lo que la Benemérita ha asegurado de que se trataba de "especialistas". Los sospechosos, M.A.C.T. de 27 años y A.S. de 29 años, fueron trasladados, junto a la furgoneta, a dependencias de la Guardia Civil.

Asimismo, la investigación ha revelado que recientemente se habían denunciado otros tres robos, dos en Tomares y uno en Bormujos con el mismo 'modus operandi'. Este consiste en forzar hábilmente las cerraduras, "de manera limpia y sin que apenas se note, de forma que si alguna persona pasa por las inmediaciones no aprecie daños en la puerta, mientras en el interior y provistos de guantes, consuman el robo".

Finalmente, la Guardia Civil comprobó que ambos implicados tienen numerosos antecedentes policiales y que M.A.C.T. había sido detenido el pasado año por formar parte de una banda dedicada al robo con fuerza en Cádiz.