El Ayuntamiento de Balaguer no cuelga la bandera española "porque no tiene dinero"

  • Debe reforzar el balcón para evitar desprendimientos por exceso de peso.
  • El alcalde Josep Maria Roigé asegura que "no se niega" a colocarla pero recuerda que las cuentas están prorrogadas y pueden hacer inversiones.
El alcalde de Balaguer, Josep Maria Roigé, muestra la sujeción de las banderas que ondean en el balcón consistorial, entre las que no se encuentra la española.
El alcalde de Balaguer, Josep Maria Roigé, muestra la sujeción de las banderas que ondean en el balcón consistorial, entre las que no se encuentra la española.
AYUNTAMIENTO DE BALAGUER
El alcalde de Balaguer, Josep Maria Roigé, muestra la sujeción de las banderas que ondean en el balcón consistorial, entre las que no se encuentra la española.

El Ayuntamiento de Balaguer (Lleida) no tiene colgada la bandera española en el edificio consistorial puesto que para poderla colocar es necesario instalar un nuevo palo y reforzar el balcón para evitar desprendimientos. "Tenemos el presupuesto prorrogado y no podemos hacer inversiones y hasta que no tengamos este presupuesto no podemos colgar el palo", según ha explicado su alcalde, Josep Maria Roigé (CiU).

Roigé ha admitido que la bandera española no ondea en el balcón del ayuntamiento "por una cuestión de principio político" puesto que la mayoría de la ciudadanía y de las fuerzas políticas con representación al consistorio "considera suyas las banderas que ya hay" colgadas en la casa consistorial: la senyera, la europea y la de la ciudad.

Pese a ello, "no nos negamos a colgarla", ha afirmado Roigé, consciente de que la ley les obliga a izarla. Lo que ocurre, ha asegurado, es que el consistorio no tiene recursos para reforzar el balcón e instalar un nuevo palo, un "Hasta que no tengamos presupuesto para colocar este palo no lo podemos hacer", ha asegurado el alcalde de Balaguer, argumento que ya ha utilizado ante los requerimientos de la Delegación del Gobierno en Cataluña.

Se da el caso de que Balaguer es uno de los ayuntamientos que paga sus impuestos a la Agencia Tributaria Catalana. La Delegación del Gobierno denunció la decisión adoptada por el pleno en marzo. Además, el consistorio forma parte de la Asociación de Municipios por la Independencia (AMI), de la que Roigé es vicepresidente.

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